Bosque de Evensong...
—Ahhhhhhhhhhhhh... No quiero morir. Señor, sálvameeeeeee —gritaba un asesino mientras una raíz del árbol Prampel lo aplastaba hasta la muerte.
Más de 10 asesinos entraron en esta área, pero solo uno de ellos escapó con un brazo cortado.
Ese hombre no era otro que Ares mismo. Sacrificó a cada uno de sus asesinos para escapar de ese bosque.
—Mierda... ¿Qué tenía de malo ese maldito árbol? Perdí mi maldito brazo —murmuraba Ares.
*Golpe*
Antes de que pudiese decir algo más, cayó inconsciente al suelo.
De repente otro asesino apareció de la nada y levantó su cuerpo del suelo. Este tipo era el asesino de respaldo que Ares ordenó estar en el límite exterior del bosque, en caso de que Anon escapara vivo del bosque.
—Maestro Ares, ¿me escuchas? Maestro Ares... Por favor, mantente conmigo —dijo el asesino.
De repente, una expresión de preocupación apareció en su cara al mirar la mano cortada de Ares.