—¿Cómo saben tanto sobre nosotros? —preguntó Valeria.
—La misma pregunta que ella —las hermanas gemelas hablaron con un tono unido.
—No, primero responde a mi pregunta —dijo Evangeline—. ¿Cuál es tu nombre y quién eres tú? ¿Cómo conseguiste que Frank te diera nuestros contratos de esclavitud?
—Calmaos, señoras. Dejadme responder una por una —Anon habló con una sonrisa en su rostro.
—Antes que nada, permítanme presentarme, soy Anon y para el mundo exterior soy solo un plebeyo normal, pero para ustedes, soy un cerebraxis —dijo Anon.
—¿Un qué?
—No lo sé, nunca he escuchado de un monstruo como ese.
—¿Eres un nuevo tipo de monstruo que puede transformarse en humanos? —preguntó Valeria.
—Él es un monstruo, deberíamos matarlo —dijo Ravenna.
—¿No sabes qué es un 'Cerebraxis'? —Anon preguntó con expresión confusa.
«¿Es cerebraxis un monstruo tan antiguo, que hasta los Vampiros no saben de él?» Anon pensó mientras los miraba confundido.