Esa noche resultó ser más tranquila que la primera una vez que los lugareños conocieron la verdad tras la potencia de los Vinos de Bruja. Así que, no fue sorprendente cuando el explorador estaba listo a primera hora de la mañana y había traído consigo un grupo de amigos para ayudar a cargar la barcaza.
El objetivo de hoy era enviar una barcaza completa, haciendo seis cargas de avión a seis diferentes aldeas antes del anochecer. Si todo iba bien, debería ser un objetivo fácil, pero Wolfe sabía que el primer día con el avión no sería tan sencillo.
Había estudiado los controles y estaba bastante seguro de saber lo que hacía, pero aterrizar y despegar seguiría siendo complicado hasta que practicara. Había considerado dejar que Ella hiciera el trabajo, pero sería más fácil para él cargar y descargar el avión, así que ella había decidido pasar el día trabajando con los espectáculos del Festival mientras él hacía las entregas.