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Michael y los demás dejaron rápidamente la escena del crimen.
Su misión era aniquilar los equipos de Aventureros restantes lo más rápido posible sin ser vistos.
Mientras tanto, las otras Unidades de Cazadores también iniciaron su primer ataque.
Liopham usó su Rasgotraza, Furia del Primitivo, para manifestar un Tótem Espiritual en un arbusto cerca del límite con las llanuras. Un gran grupo de más de 15 Aventureros de Nivel 1 y Mercenarios habían estado recolectando hierbas y cazando furtivamente grupos más pequeños de monstruos en las cercanías.
Con el uso del potencial completo de la Furia del Primitivo, un gran grupo de Monstruos de Nivel 1 fue atraído hacia ellos. Los Monstruos perdieron su racionalidad al percibir el tono rojo sangriento del Tótem Espiritual, y enloquecieron. Más de 60 Monstruos de Nivel 1 se lanzaron hacia el Tótem Espiritual que desapareció en el momento en que los Monstruos estaban a punto de abalanzarse sobre él.