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La enseñanza individual de Alice fue un poco diferente de lo que Michael esperaba.
Él pensó que Alice establecería un curso de entrenamiento según la información de su segunda evaluación de aptitud.
Aparte del Látigo Espiritual, que había ocultado, la información de su segunda evaluación de aptitud era correcta.
Sin embargo, Alice parecía no confiar en la información, o simplemente no le importaba.
Los dos se encontraron en un gran salón de entrenamiento, que Alice había vaciado para que lo usaran.
El salón tenía más de cien metros de largo y ancho, dando a los dos suficiente espacio para su entrenamiento.
Michael estaba de pie en el centro del salón mientras Alice le decía que se quedara allí y esperara.
Lo que Michael no esperaba experimentar sucedió después.
—¡Escapa o muere! —gritó Alice desde la distancia antes de empezar a utilizar sus Rasgos de Alma, Reino Helado.
