Mientras John sellaba al Protector del Misterio usando su formidable Autoridad del Espacio, este último se dio cuenta agudamente del grave peligro en el que se encontraba.
A pesar de transformarse en una esfera compuesta enteramente de energía Arcana, el Protector del Misterio se encontró incapaz de romper el sello espacial con su poderoso poder Arcano.
Sin otra opción, el Protector del Misterio recurrió a su última carta, una Reliquia Sagrada en su posesión.
Era una gema imbuida con ilimitado poder del Misterio, adquirida a cambio de Darklord.
—¡John, me has obligado a jugar mi mano! ¡Te mostraré que tengo muchos más trucos bajo la manga que tú! —declaró el Protector del Misterio.
Al caer sus palabras, aplastó la infinitamente poderosa gema del Misterio, desatando un torrente de poder del Misterio que se fusionó con la energía Arcana.