Después de sellar rápidamente a Rey Serpiente, John lanzó inmediatamente un ataque contra el Caballero de la Llama.
Era muy consciente de que necesitaba neutralizar rápidamente al Caballero de la Llama, un Diablo formidable, para evitar más complicaciones.
Esta urgencia provenía de su victoria incompleta sobre Corruptor, quien todavía acechaba no muy lejos de las murallas de Ciudad de la Tormenta.
Si no lograba derrotar pronto al Caballero de la Llama, los dos Demonios podrían unirse, lo que llevaría a una amenaza aún mayor.
John una vez más aprovechó el poder del Libro del Reino Astral.
Con la ayuda de este tomo místico, logró sellar completamente el palacio del Duque Arsena, asegurando que la batalla no se desbordara y causara daños significativos al área circundante.
Esta precaución era crucial ya que los miembros de otras Facciones del Orden estaban presentes alrededor del palacio del Duque Arsena, ayudando a eliminar a los demonios traídos por el Caballero de la Llama.