El núcleo se vendió por 3 millones de Estrellas. Los artículos posteriores también se vendieron por números similares. Nada superó la marca de los 5 millones aparte del primer artículo. Aun así, los números eran astronómicos.
En la primera sesión solamente, pudo contar que había 10 artículos que todos se vendieron por más de 2 millones de Estrellas.
El tiempo pasó y la subasta procedió sin problemas. El artículo que él había venido a buscar no iba a ser presentado en la primera sesión, así que cuando llegó el descanso, no había comprado nada en absoluto.
—Damas y caballeros, esto marca la primera sesión de la subasta. Nos reuniremos de nuevo después de una hora —dijo el anciano—. De todos los presentes, parecía que él era quien más necesitaba el descanso.