Ted no podía creer la audacia del ídolo novato que lo miraba directamente a los ojos.
Había vivido 29 años y había sido productor durante 9 de esos años, y la última vez que fue desafiado así fue durante los primeros años de su carrera.
Había obtenido premios por todas partes.
Sin embargo, al mirar a los ojos de este novato, le parecía como si June pensara que eran iguales—y eso no le gustaba.
Era consciente de los problemas que enfrentaba—con sus canciones sonando repetitivas y todo eso.
No obstante, estaba decidido a resucitar su carrera.
Ted quería intentarlo una y otra vez...
...y no le importaba a quién tenía que sacrificar para llegar allí.
June, por otro lado, estaba mirando los lagañas blancas en el ojo derecho de Ted.
Se preguntaba si era la única persona que lo veía.
Era tan grande que June se preguntaba si era humanamente posible crear unas lagañas tan enormes en tan poco tiempo.
No parecía algo que un ojo produjera—sino más bien ¿algo así como un forúnculo?