June se frotó las mejillas adoloridas mientras se sentaba en el pequeño sofá. Aún no había pasado ni una hora desde que habían llegado y ya habían sido emboscados por un grupo de señoras mayores.
Parecía que la fama de June no tenía límites y había llegado incluso a las partes más rurales de la Provincia de Gangwon.
—Lo siento por eso —dijo la señora mayor llamada Bok-soon mientras les ofrecía a los dos chicos un poco de té dulce casero—. Las damas solo están emocionadas de verte regresar. Todos vemos Estrellas en Ascenso en mi casa los viernes, y somos grandes admiradores. Nos entristeció cuando te acusaron de ser el hijo de los Chois cuando no lo eres. Me alegra mucho que hayas vuelto.
—Está bien —dijo June a pesar de sus mejillas doloridas—. Gracias por apoyarme en el programa.
—¡Todos esperamos tu debut! Aunque realmente no sabemos cómo darte estrellas —admitió ella.
June soltó una risita suave.