—Solo quería vivir... —Justin quería vivir por su familia, por aquellos a quienes más quería, para poder regresar a casa algún día. Ese deseo se convirtió en obsesión después de presenciar la muerte por primera vez.
Primero fue con Adam, y luego durante el Rescate del Calabozo de Bruto, presenció la muerte de aún más personas. A pesar de desempeñar bien su papel, se encontró al borde de la muerte tantas veces.
Para muchos, él siempre era el optimista, el tipo jovial sin preocupaciones en el mundo.
Pero por dentro... estaba desgarrado.
Tenía tantas pesadillas con la muerte que eventualmente le causaron muchas noches de insomnio. Todo esto se acumulaba, empeorando día a día.
Hasta que...
—¡YA NO AGUANTO MÁS! —Justin se desesperó.
Tan desesperado que de hecho hizo un trato con Adrien en ese momento, después de que le ofrecieran una forma de preservar su vida y escapar de la muerte.
Debería convertirse en un No-muerto, uno de clase alta, por supuesto, pero aún así un No-muerto.