Mientras todos los Aventureros de Rango Heroico se esparcían por el campo de batalla, la tensión que impregnaba el aire se volvía tan vívida que todos podían sentirla.
Era un espacio masivo, pero de alguna manera ambos bandos se sentían tan cercanos al conflicto como era posible.
El grupo dentro del domo blanco, ignorantes pero esperanzados, apoyaban por completo a Jet y Lux.
Ahora que Noah se había unido a la lucha, también contaba con su apoyo.
El otro bando, envuelto por una barrera dorada, ya sabía quiénes eran los enemigos—Jet y Lux—y también sabían que tenían que morir.
Con estos dos bandos teniendo sus representantes en un punto muerto de tres contra uno, la batalla estaba a punto de volverse aún más caótica.
Y todos esperaban con anticipación para ver quién ganaría, y más importante aún...
... Quién perdería.
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—¡No te metas en esto, Sherlock! —gruñó Britta mientras miraba intensamente al joven que la había detenido.
