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—Estoy a punto de... ¿descubrir qué?
Mientras Scylla tenía este pensamiento, vio acercarse un dedo de la figura enmascarada.
—¡No, no! ¡Aléjate! —Sus pensamientos resonaron a medida que se acercaba.
Lamentablemente, no pudo hacer nada para detener su avance. Pronto, cerró por completo la distancia y alcanzó su frente.
—Tut —nada más que un suave toque retumbó en su cabeza cuando el dedo hizo impacto.
Sin embargo, en el momento en que Scylla relajó su cuerpo...
—ZZZTTZZZZ! —... llegó la verdadera afluencia.
—¡ARRRRGGHHHHHHH! —Sus gritos llenaron la amplia habitación, seguidos de convulsiones por todo su cuerpo.
Su cabeza en particular se balanceaba mientras su cabello volaba por todos lados. Como una loca, constantemente sacudía la cabeza y su rostro mostraba atisbos de locura.
Lágrimas caían por sus ojos, haciendo que su máscara de pestañas se derritiera. La causa era un sueño de líneas negras corriendo por sus mejillas.
