Scylla se divertía en silencio mientras observaba.
Todo este intercambio resultaba ser mucho más entretenido de lo que esperaba.
—Me está dando tanta hambre... —Se lamió los labios mientras observaba la sonrisa salvaje de Fenrir.
—Parece que está muy confiado. Supongo que estaba preocupada sin razón, después de todo.
Scylla no era una luchadora, por lo que no sabía nada sobre cómo percibir las habilidades de sus oponentes.
Solo sabía una cosa sobre todo este intercambio.
—¡Fenrir ganará!
—Ahh... Ya veo cuál es el problema. —La voz del hombre de la máscara de repente llenó la habitación.
Se rascó la parte posterior de la cabeza un poco, casi como si fuera un patoso incorregible.
—Parece que [Ocultamiento Grande] todavía estaba activo. Mi error... —Sus susurros eran apenas audibles, pero Scylla captó esas palabras.
—¿[Ocultamiento Grande]? ¿Qué es eso?
—¡Pfft! ¡No hay necesidad de seguir con tu farol! —Fenrir gritó, arrojando su silla mientras se alejaba de la mesa.