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—Entonces... ¿ahora qué?
La voz resonó desde Justin, sus ojos directamente posados en Adonis.
—Si el Señor Ralyks planeó todo esto, de seguro habría pensado en ocuparse de las consecuencias.
La pregunta era válida, y todos comenzaron a mirar a Adonis, aunque algunos también dirigieron sus miradas a Rey, ya que él también apoyaba a Ralyks.
—¿Cómo exactamente vamos a regresar al...?
Antes de que Justin pudiera pronunciar otra palabra, un masivo portal apareció debajo de ellos, haciendo que los nueve—diez, si incluías al Familiar—descendieran en el torbellino de la brecha espacial.
~¡WHUSH!~
En un instante, sus cuerpos quedaron tendidos planos dentro de la sala de estar de sus cuartos.
Expresiones de asombro llenaron a los Extranjeros de Otro Mundo mientras miraban alrededor del entorno familiar, todos ellos casi incapaces de negar los hechos por más tiempo.
¡El Señor Ralyks había estado en control desde el principio!
