—Espera... ¡¿Pero qué acabo de hacer?! —Tardó un día entero y un par de horas más, pero Rey finalmente despertó.
Su cuerpo entero se sentía más ligero que nunca y su mente estaba clara.
Fue mientras disfrutaba de esta nueva sensación que recordó su última conversación con Conrad, incluyendo el error que cometió.
—¡¿Gratis?! ¡¿Estaba loco?! —Su voz resonó en el vasto Piso 99, que parecía tan desprovisto de vida como uno podía imaginar.
Rey suponía que debió haber criaturas aquí antes de que apareciera el Dragón, pero no se veía ni rastro de ellas.
No era de extrañarse.
También pudo notar el hedor generado por los cadáveres de los humanos que Jer'ard había matado, así que usó Magia del Fuego para quemarlos hasta convertirlos en cenizas.
Rey seguía furioso, pero no tardó en darse cuenta de la futilidad de su enojo.