Como no ha habido tiempo para hacer alteraciones, Feng Yi Lan ha ayudado a Li Xue con el vestido utilizando algunos alfileres para colocarlo, los cuales Li Xue estaba haciendo su mejor esfuerzo por llevar en el escenario, sin que nadie lo notara.
Pero justo cuando había avanzado la mitad de la pasarela, sus pasos casi se detuvieron en seco al sentir que uno de los pliegues se abría a su lado. Sus pupilas se dilataron por un segundo, pero justo antes de que alguien pudiera notarlo en su expresión, una sonrisa suave cubrió sus labios, deslumbrando a todos a su alrededor mientras sus manos presionaban sobre sus caderas de ambos lados, revelando la parte confiada del vestido.
El público la miraba a ella y luego al vestido. Sin duda, la belleza era llevada bien con la perfecta cantidad de gentileza y sonrisa.