—¿Contrato de sangre? —Esa frase sorprendió tanto a Kyle como a Kate. Los dos nunca habían pensado que fuera posible que hubiera un contrato o algo así entre humanos y animales.
—¿Es realmente seguro el método? —preguntó Kyle con el ceño fruncido.
—Algunas personas han intentado comunicarse con su mascota formando un contrato de sangre con ella. Este informe no había sido verificado aún, pero se decía que algunos tenían éxito mientras que otros sufrían repercusiones —General Ryan echó un vistazo a Kate—. Algunas personas incluso intentaron este método con los animales mutados gigantes y casi se matan. Estos animales mutados gigantes ya no tienen mucha racionalidad, si es que alguna vez la tuvieron. De todas formas, su inteligencia era similar a la de perros rabiosos que morderían a cualquier persona que vieran.
Así que por ahora, decían que esto solo se podía intentar con aquellos que tenían mascotas que también habían mutado y que estaban cercanos a ellas.