A pesar de que los cristales de energía de un solo color eran el tipo más bajo de cristal y solo valían $50 por pieza del tamaño de un dedo meñique, Ainsley y la Familia Sloan no tenían ni un solo cristal de energía.
El Abuelo Yofan tampoco preparó cristales de energía ya que no esperaba que Ainsley ganara mucho dinero para alcanzar el piso 11, de todos modos.
¡Ahora, sin cristales de energía de un solo color, Ainsley no podía entrar al piso 11 en adelante!
La bebé miró al instante al Espíritu del Padrino y le envió un mensaje en secreto a través de telepatía.
—Tío, ¿el casino acepta intercambiar cristales de energía por dólares?—
Ainsley a propósito no preguntó al personal del casino ya que temía que el personal se riera de ella por no tener un cristal de energía.
Aquellos que visitaban el piso 11 serían al menos de una familia mafiosa de rango medio o de otras fuerzas a la par de ese nivel.