Tres meses habían pasado fácilmente. Su Xiaofei estaba decidida a ver a sus hijas siempre que podía. Cuando se permitió que las gemelas fueran transportadas de vuelta a casa, ella no se separó de su lado y observó atentamente mientras las llevaban a la habitación estéril donde ocuparían durante unas semanas.
Mientras tanto, Ye Mingyu continuaba cayendo en la depresión ya que no podía conseguir ningún papel en las audiciones en las que participaba las últimas semanas. Siempre perdía los papeles frente a otras, la mayoría de ellas firmadas bajo la compañía de Su Xiaofei.