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—El guardaespaldas debe haberte informado —concluyó Jiang Yuyan.
—Él perderá su trabajo si no informa —comentó Lu Qiang.
Cuando Nixxxie llevó a Jiang Yuyan al baño dentro de la universidad, el guardaespaldas las siguió porque era su trabajo hacerlo, aunque se quedó de pie un poco lejos.
Se ofreció a llevarlas al hospital y como Nixxxie sabía que era el guardaespaldas de Jiang Yuyan, aceptó de inmediato. Además, Nixxxie no tenía su coche.
Antes de llevarlas al hospital, el guardaespaldas ya había pasado el mensaje a Lu Qiang. Como era el guardaespaldas personal de Jiang Yuyan, se le había instruido informar cualquier cosa relacionada con Jiang Yuyan directamente a Lu Qiang.
Sin esperar ni un momento, Lu Qiang se fue al hospital.
Cuando llegaron a casa, sorprendió a los miembros de la familia que estaban en casa en ese momento, la pareja mayor y Ning Jiahui. Apenas había pasado la hora de comer y estaban en la sala de estar.
