Recomendación Musical: Ships are Coming-Trevor Morris
—Temprano en la mañana, lejos de las ciudades y en el bosque de Weswalls, ubicado cerca del mar, dos hombres cargaban un poste de madera sobre cada uno de sus hombros. Entre los dos lados del poste había una red gruesa que sostenía a una sirena, que había sido capturada hace unas semanas.
La sirena que llevaban tenía una cola amarilla, su cabello negro enredado pegado en su rostro. Hacía ruidos incoherentes, de donde no salían palabras de sus labios ya que un paño había sido atado alrededor de su rostro, impidiéndole gritar o pedir ayuda.
—¿Por qué piensas que ha sido mantenida aquí en el máximo secreto, en lugar de ser vendida hasta ahora? Pensé que las sirenas estaban en demanda —declaró uno de los hombres que caminaba al frente.