Mientras el ciempiés gigante estaba enroscado alrededor de la flor de loto roja, Mira y María estaban cayendo desde el cielo a velocidades extremas. Mira tenía un par de alas de hielo en su espalda y estaba usando tanto Qi como podía en ellas para aumentar más la potencia y la velocidad. María estaba acumulando Qi en sus puños mientras esperaban llegar encima del ciempiés.
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10 minutos antes
—Entonces, ¿cómo quieres tratar con el ciempiés ahora que está debilitado? Obviamente, Mira tendrá que ser la que lo golpee, pero aún siento que no tiene suficiente poder —preguntó Celaine, a lo que las tres comenzaron a pensar.
—¿Podrías usar esa habilidad de ataque combinado que inventaste? ¿Quizás podríamos practicar un poco y acumular algo de poder? —sugirió María, pero Mira negó con la cabeza.