Me senté en la isla de la cocina y hice una pausa. Música... ¿¡¿por qué no pensé en música?!? Normalmente hacía mis mejores reflexiones con música. Tendría que conseguir lo que este mundo considerase música.
—Uno de ustedes, encuentre la forma de que consiga música —dije bruscamente, molesta por haber olvidado la música. Habría sido una manera mucho más simple de cortar el silencio que llenar mi lugar con gente.
Liu Wei sacó su teléfono y empezó a trabajar su magia.
—¿Alguna en particular? —preguntó, mirándome, tratando de descifrar mi humor. Buena suerte con eso, Boyo, yo todavía estaba tratando de comprender mi propio humor.
—Ni idea. No tuve música en mi segunda vida, y dudo que la música aquí sea igual a la de mi mundo anterior. Consígueme todo lo que puedas; pop, clásica, heavy metal, bluegrass... Realmente no me importa. Solo música.
Con su tarea en mano y yo sin intentar matarlo, Liu Wei salió rápidamente de la habitación.