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—Como dije, quiero un manual para esto...
Chi Ai señaló el colgante de jade.
Yu Holea miró fijamente el colgante de jade.
Por alguna razón, seguía sintiendo como si hubiera visto el colgante antes.
De repente, sus ojos se iluminaron y se levantó.
Entró en el templo.
Chi Ai estaba confundida por la acción repentina de Yu Holea.
Justo entonces, vio a Yu Holea sacando un libro.
El libro era delgado y pequeño.
—Aquí
Diciendo eso, Yu Holea le pasó el libro.
—¿Eh? ¿Tienes el manual? ¿Por qué estás dispuesta a dármelo?
Chi Ai tomó el manual y lo guardó en su bolso.
Yu Holea murmuró ligeramente,
—Mi maestro me dijo que una persona con un collar espiritual vendría aquí por el manual y que tengo que entregarle el manual.
Una vez, su maestro efectivamente había mencionado a una persona con el collar espiritual.
Le había pedido que entregara el manual a esa persona.
