Después de hablar con la anciana por un rato, Yu Qi y Aoi abandonaron el lugar. Yu Qi planeaba ir al lugar donde habían retenido a la esposa e hijo de Fua Sui Jue.
Usando a Aoi como el GSP, Yu Qi llegó a un lugar donde había un almacén abandonado. Sin embargo, algo era extraño en ese lugar. Había un grupo de personas que controlaban, bueno, que custodiaban el lugar.
Yu Qi miró a Aoi y sonrió. —Creo que estamos en el lugar correcto.
—Sí, Maestra. El olor de ese niño es muy fuerte aquí —Aoi asintió.
—¿Puedes detectar cuántos hombres hay dentro del lugar? —preguntó Yu Qi.
—Unos 5 hombres dentro. Hay otros dos hombres en cada lado fuera del almacén —Aoi explicó—. Él podía distinguir un olor diferente de los demás aparte de la esposa e hijo de Fua Sui Jue.
—Significa que será difícil para nosotros, solos, manejar esta situación —Yu Qi suspiró.
