Durante las próximas 30 horas, Shiro llevó a Lisandra y Yin a unirse a ellos en una mazmorra de nivel 65. Aunque los monstruos eran duros, aún estaban a su alcance y podían matarlos con su poder combinado.
Shiro, sin embargo, aprovechó la oportunidad para probar su nueva arma, Génesis.
—¿Dónde encontraste otro arma, Shiro? —preguntó Lyrica mientras decapitaba a uno de los monstruos con la ayuda de Lisandra.
—¿Esto? Solo conseguí algunos objetos y mejoré mi vieja pistola. —Shiro respondió con una sonrisa ya que ya habían visto la Canción del Presagio que ella creó durante su lucha contra el Monarca de Sangre.
—Heh~ ¿Qué hace? —preguntó Madison con curiosidad.
—Fufu~ Solo observa. —Shiro sonrió.
Levantando su cañón de mano, echó un vistazo al monstruo que saltaba hacia ella y sonrió maliciosamente.
*Clack
Cambiando el tipo de bala que quería usar, apretó el gatillo.
*¡BANG!