```
Cielo siguió con la mirada las figuras de Dominic y Dane hasta que su esposo se sentó frente a los dos empresarios. Dane se sentó en la mesa cerca de ellos, sin unirse a su conversación, pero lo suficientemente cerca para escuchar su discusión.
—Correcto —Cielo suspiró, sintiéndose un poco decaída—. Mi esposo es un hombre tan ocupado. Probablemente trasladó su reunión aquí, así que no podía coquetear ahora mismo.
Cielo echó un vistazo a Paula y Leo. Ellos seguían conversando, de acuerdo en algo que a Cielo no le importaba.
—Está bien. Entonces te envío un mensaje —Paula asintió a Leo antes de lanzarle una mirada a Cielo—. Cielo, lo siento. Solo estamos hablando de finalizar nuestra cita antes de la sesión de lectura. No quería que te sintieras excluida.
—Oh —Leo estaba algo sin palabras, sintiéndose ligeramente apenado si Cielo se sentía así—. Lo siento si es así como te sientes.
¿En serio?