—Madre Yu calmó a su esposo que estaba enojado con ella antes de volverse hacia Mo Qiang que estaba parada frente a ella y luego preguntó con una voz sutil —¿Estás bien, Qiang'er?
Mo Qiang miró la parte superior de la cabeza de su supuesta madre, los puntos de favorabilidad que se mostraban sobre la cabeza de su supuesta madre también estaban en números negativos, pero quizás porque era su madre, los números solo eran de dos dígitos; por otro lado, los puntos de favorabilidad sobre la cabeza de su padre eran simplemente escandalosos, probablemente era uno de esos padres que creían que no había manera de que su hijo estuviera equivocado.
—¿Qin Qin? —Mo Yan llamó a su hija de nuevo cuando vio que la última no le respondía y Mo Qiang, que estaba mirando la parte superior de sus cabezas, se volvió para mirar a su supuesta madre a los ojos y asintió —Estoy bien, solo un poco mareada.
Mo Yan asintió y luego, después de dudar un momento, habló —No estoy enojada contigo por el incidente de anoche, pero necesitas entender que no puedes tratar a tus esposos como quieras. Son tus compañeros, no juguetes a los que puedes romper y volver a armar como desees.
—¡Esposa! —Wen Gui tenía miedo de que su hija se alterara de nuevo, por eso intentó detener a su esposa, pero esta le palmeó la mano y luego se volvió a mirar a Mo Qiang, que escuchaba en silencio —Qin Qin, debes ir y disculparte con Hui'er, él todavía es joven y que diga algo que no te parezca bien es normal, romperle la pierna fue un poco demasiado de tu parte.
En ese momento, incluso Wen Gui no dijo nada porque tampoco quería un caos innecesario en su casa, sus tres yernos eran un poco obstinados, ¡pero eran buenos niños y también eran guapos!
¿Hui'er? Si no se equivocaba, era el tercer esposo y el más joven, ¿verdad? Mo Qiang pensó en cómo este esposo suyo había provocado deliberadamente al anterior propietario para que le hiciera daño y así poder tener un tiempo cómodo con Mo Xifeng y sus labios se torcieron.
Pero no había manera de que pudiera decir algo en voz alta, así que solo pudo asentir y decir —Entiendo.
Mo Yan iba a decir algunas palabras más para hacer entender a su hija la importancia de ser una esposa buena y comprensiva cuando oyó que su hija estaba de acuerdo con su sugerencia. Sorprendida, levantó la cabeza y miró a su hija antes de preguntar con sorpresa —¿Tú? ¿Aceptaste así como así?
—¿No se supone que debo? —Mo Qiang le respondió a su madre mientras parpadeaba, sabía que la propietaria anterior se habría negado tercamente a aceptar la palabra de su madre, y mucho menos a disculparse con su esposo, pero—
Cuando pensó en todas las malas ideas que tenían guardadas en el estómago sus esposos, decidió que era mejor mantenerse alejada de ellos y divorciarse lo más rápido posible.
No había necesidad de ir en contra de ellos, ¿ponerse verde de la cabeza? Ja, estaban invitados a convertir su cabello en una pradera—— ella trabajaría duro para volver verdes estos terrenos baldíos y sus esposos pueden esforzarse por volver su cabello verde.
—No, no es eso —Mo Yan estaba realmente sorprendida al ver que su hija no discutía con ella. ¿Era por todos los gases venenosos que le llenaron la cabeza? ¡Si supiera que su hija se volvería tan educada entonces la habría echado a la calle antes!
Pero todavía estaba preocupada ya que su hija era alguien en quien no se podía confiar, por eso Mo Yan se volvió a mirar a Mo Xifeng, su segunda hija y dijo —Ve con ella, Xifeng. Si hay alguna necesidad de que intervengas, por favor haz lo que consideres apropiado.
Como Mo Yan le dio permiso completo a Mo Xifeng, esta última asintió y luego apretó sus dedos en puños —Entiendo, Madre.
Mo Qiang:
.....
¡No había necesidad de hablar con los puños! ¡Ella era una pacífica y honesta trabajadora de oficina!
Al final, no había nada que Mo Qiang pudiera decir, podía ver que la gente de esta casa ni siquiera depositaba la mínima confianza en ella, por lo que solo pudo darse la vuelta y esperar a que Mo Xifeng la guiara hasta la habitación donde se alojaban sus esposos.
Dado que su familia no tenía dinero... su casa apenas tenía habitaciones. Aunque el edificio se veía bastante bien a pesar de estar deteriorado, Mo Qiang pudo ver que la condición del edificio era realmente mala, con todo el óxido que cubría las paredes, estaba preocupada de que el edificio pudiera caer en cualquier segundo.
Levantó la mano y luego colocó sus dedos sobre la pared oxidada, sus ojos parpadearon y Mo Qiang no pudo evitar fruncir el ceño. Este lugar realmente no era habitable, estaba cubierto de óxido y tornillos y tuercas sobresalían por todos lados, realmente era peligroso vivir aquí pero si tuviera algunos troncos y—
—Espero que no estés pensando en usar tus huevos antes de que estén puestos —antes de que pudiera terminar de pensar, Mo Qiang escuchó la voz de la Pequeña Jiao resonar en su cabeza mientras la miraba dominante desde arriba—. Estás aquí para revivir la naturaleza, no para empezar otra matanza.
—Sí, sí... entiendo —respondió Mo Qiang, pero su cabeza no dejaba de funcionar, tenía que pensar en una forma de lidiar con estas condiciones, pero primero —
—Ya llegamos —sus pensamientos fueron interrumpidos por Mo Xifeng que estaba frente a una puerta metálica con forma de cápsula mientras levantaba la mano y presionaba el botón del intercomunicador que estaba al lado de ella.
Se volvió a mirar a Mo Qiang y luego dijo con una voz estoica —Sé gentil y amable, si vuelves a levantar la mano entonces tendré que noquearte de nuevo, hermana.
Mo Qiang:
—…. Esta hermana suya era realmente estricta.