—Déjame en paz. Suéltame —Elliana se quejó y luchó mientras Dexter la alejaba de la chica vampiro, usando la suficiente fuerza limitada para que Elliana tampoco resultara herida.
La chica vampiro miraba a Elliana, jadeando por aire, mientras tosía agua fuera de sus pulmones.
—¡Tú, p*rra! Te mataré, z*rra que busca atención —ella gritó, sin rendirse todavía y Elliana se enojó aún más.
—Ssshh, por favor cálmate, Elliana —Dexter intentó, alejándola.
—¿Por qué? ¿Por qué debería calmarme, Dexter? ¿Acaso lo que ella me hizo está justificado ahora? ¿Es que en tus ojos también soy la chica mala? Hubiera estado bien si mi vestido se hubiera quemado y hubiera quedado desnuda frente a todos. ¿O hubiera estado bien si me ahogara —preguntó Elliana?
—Entiendo lo que estás diciendo, Elliana, pero solo te estás haciendo daño a ti misma de esta manera y nada más. Tú y yo ambos sabemos que te arrepentirás de esto cuando salgas de este estado —Dexter continuó abrazándola desde atrás.