—El señor Rodney se apresuró a llegar cuando escuchó que Escarlata estaba a punto de hacer una transmisión en vivo. Se hicieron arreglos en la cocina, se configuraron las cámaras dron, se puso su traje de chef y Anna también se vistió para actuar como su chef asistente. El bono adicional era Justin, quien ahora tenía trajes de chef pequeños hechos a medida del supermercado. Habían sido hechos aquí, en la estrella azul en la fábrica. Se veía tan lindo con esa expresión seria en su rostro intentando parecer concentrado. Tenía las mejillas hinchadas porque estaba reteniendo aire por alguna razón.
—Mi bebé, deberías sonreír y respirar o te asfixiarás —Escarlata pellizcó su mejilla y se desinfló.
Ella miró al señor Rodney, quien estaba contando con sus manos, tres, dos, uno y las cámaras dron se volvieron verdes.
—Hola a todos —Escarlata retomó su dulce personalidad de chef, hablando alegre y sonoramente—. No me han visto en dos meses, ¿verdad?
