Lucas miró a su primo impotente y sacudió la cabeza. —Vamos, vamos a la sala de misiones y luego tú puedes intercambiar tus cosas primero. Discutiré esto contigo.
—Lucía, puedes poner estos recursos en la sala de comercio con Marcos. Yo discutiré con Lucas —dijo Dylan.
—Entendido —Lucía asintió y luego agregó—, no olvides pedirle más cosas. Puedes amenazarlo si quieres.
Lucas:
—… ¿tú eres mi primo o no?
Sintió que este primo suyo realmente le gustaba demoler su plataforma.
¡Incluso se estaba poniendo del lado de los demás y no del suyo! ¡Hmph!
Marcos se rió de su interacción. Sabía que en términos de negociación, sería mejor dejarlo a Dylan porque básicamente era el que tenía las mejores habilidades para hablar. Bueno, como una persona que planeaba construir una compañía bajo su propio nombre, ¿cómo podrían no ser buenas sus habilidades?
—¿Yo solo intercambiaré las materias primas, verdad? —Marcos preguntó de repente.
