—Yosh... Ya hice todo lo que pude y ahora no puedo hacer nada más. ¡Siempre será mejor que muera una persona en lugar de dos, verdad?! Eee... una persona más una bestia, para ser exactos... Bueno entonces, ¡Xiao Hei, buena suerte para ti! ¡Adiós!
Cuando Tang Li Xue quería activar su [Forma Etérea] e irse lo más lejos posible de aquí...
—Xiao Bai... —Xiao Hei llamó a Tang Li Xue mientras se acercaba lentamente a ella.
Xiao Hei se arrodilló y se quitó un collar con un anillo de su cuello.
El anillo en particular era muy exquisito, como una obra de arte cuidadosamente tallada por el supremo maestro. Estaba hecho de un metal especial desconocido que brillaba con una tenue luz azul. De un vistazo, Tang Li Xue supo de inmediato que este anillo debía ser muy valioso.