Tang Li Xue también ya había puesto a Little Loki y a Yaya en el espacio para mascotas de su sistema a tiempo antes de que esos Cultivadores de la Etapa del Alma Naciente pudieran escanearlos y encontrarlos.
Tang Li Xue apretó sus manos nerviosamente cuando vio tantos guardias reales y soldados imperiales dispersos por toda la calle, y muchos de ellos también volaban sobre el cielo de la Ciudad Imperial para patrullar.
Los guardias reales y los soldados imperiales revisaban a las personas de aspecto sospechoso en la calle una por una cuidadosamente, y algunos de ellos incluso eran detenidos.
—Sigh... Realmente no debería salir en este momento y simplemente esperar pacientemente en mi habitación. —suspiró Tang Li Xue con arrepentimiento, pero ya era demasiado tarde para retroceder ahora.
Tang Li Xue aceleró sus pasos para pasar rápidamente esos guardias reales y soldados imperiales.
Lamentablemente, algunos guardias reales la vieron inmediatamente y la llamaron:
