—Hoy no les enseñaré sobre nada en particular, sino que solo les diré a los tres las reglas absolutas que deben obedecer sin importar lo que pase en cualquier situación posteriormente —dijo la Instructora Mei Lan con una expresión que se volvió realmente seria e incluso su tono se volvió muy severo.
Las expresiones de Tang Li Xue, Bing Yi y Hei Yinghao también se tornaron muy tensas.
—Primera regla: ¡Mi orden es siempre absoluta! Por lo tanto, cuando les ordene hacer algo, solo háganlo tan rápido como puedan en ese instante sin ningún retraso. ¡No digan ni pregunten nada a menos que yo les permita hacerlo!
—Segunda regla: ¡Nunca se alejen a más de cinco pasos de mí a menos que les diga que lo hagan!
—Tercera regla: ¡Nunca hablen, pregunten o digan nada a nadie, incluso entre ustedes, a menos que yo les permita hacerlo!
