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—¿Quién te enseñó este método? —Helan YuZe caminó hacia Huang Ying Yue. No quería verla alejarse más de él, pero ahora que había comprendido su confuso estado de ánimo, se sentía un poco mejor.
Es solo que no estaba seguro de por qué se sentía de esa manera. La forma en que cada vez que la veía, quería estar cerca de ella para averiguar qué le había pasado desde el día en que la hirió. Necesitaba tiempo para averiguarlo.
—¿Dónde aprendiste este conocimiento? —Sima Ke Xin pensó durante mucho tiempo. Nunca había oído hablar de este método de golpear el bambú para ganar fuerza externa.
—Yo —Huang Ying Yue señaló hacia sí misma.
—... —Helan YuZe
—... —Sima Ke Xin
—¿Por qué piensas que golpear el bambú hará que tus puños sean más fuertes? —Sima Ke Xin entrecerró los ojos.
