[Dominio Interno, La Gran Montaña Kunlun, segundo nivel]
Cuanto más avanzaba, más veía imágenes extrañas. Había riquezas, tesoros, hombres hermosos, poder y mucho más.
Todas ellas eran suficientes para atraer la atención de las personas. Sin embargo, ella pasaba por estas imágenes una tras otra sin detenerse o mirar atrás. Para ella, esos montones de riquezas y tesoros eran valiosos; desafortunadamente, demasiada tentación era un desastre.
Le encantan los tesoros, pero no al punto de la locura y la avaricia. Solo obteniendo esos tesoros con su esfuerzo los hace valiosos.
Poder—sin el proceso de las dificultades, ¿tiene sentido obtener algo gratis? ¿Es algo de lo que debería alegrarse y estar orgullosa? Obviamente, no. Solo sufriendo y escalando el camino espinoso paso a paso, de débil a fuerte, de nada a poderoso, hace que la vida sea placentera y satisfactoria.
¿Hombres hermosos? Pensando en esa escena cuando se encontró con hombres hermosos, Huang Ying Yue se estremeció. Parecía recordar que los rostros de esos hombres hermosos eran personas que conocía.
Pero uno de ellos le era extremadamente familiar. El hombre se parecía al zorro, Xiao Li. Pensando en cómo ese hombre se aferraba a ella de manera coqueta y su apariencia seductora de zorro en el hanfu rojo, sentía escalofríos.
Afortunadamente, eso era solo una ilusión. Si todas esas ilusiones fueran reales, ella quizás no se atrevería a enfrentarse al zorro.
[Dentro del Pequeño Mundo Etéreo]
—¡Achís! ¿Quién se atreve a hablar a mis espaldas de este ser honorable? ¿Están cansados de vivir? ¿Esos bestias están ociosos? Si tengo tiempo, iré a patear el trasero de esos estúpidos mocosos y los golpearé en el barro para que vean por qué la papa puede volar! —Xiao Li, que se bañaba despreocupadamente en la cascada espiritual en el Pequeño Mundo Etéreo, estornudó y se frotó la nariz con duda. Sus orejas se movían de un lado a otro.
—¡Pohh! ¡Ahhhh! ¿Qué bastardo se atreve a golpear en la cabeza de este ser honorable? —Se oyó un sonido de algo tocando, acompañado por un quejido y un sonido furioso de Xiao Li.
Se giró para mirar al culpable, entonces de repente cambió su cara de disgusto por una sonrisa como brisa primaveral.
—Jefe Yun, ¿qué pasa? —Xiao Li preguntó mientras sacaba una toalla de la nada para envolver su cuerpo peludo.
Xiao Yun "..."
Mirando al zorro que se envolvía en la toalla, Xiao Alan, que acababa de llegar después de hacer turismo en el espacio, torció los labios.
—Xiao Li, ¿qué estás haciendo? —Xiao Lan intentó hacer una expresión sencilla, pero se podía ver que sus labios temblaban.
—¿Acaso ves que estoy asando carne en el patio trasero? —Xiao Li miró a Xiao Lan con los ojos bien abiertos.
Xiao Lan....
—No pudimos contactar a la maestra; en lugar de preocuparte por ella, ¿todavía tienes tiempo de bañarte aquí despreocupadamente? —Xiao Yun preguntó insatisfecho mientras caminaba de un lado a otro en el espacio.
—Jefe Yun, no tienes que preocuparte por la maestra. Por favor, confía en ella. Creo que ella puede resolver su problema. No era una niña. Para ser más fuerte, tiene que soportar la dificultad y la miseria para que no crezca mal —el zorro lo dijo en serio mientras lamía su pata rosa.
—Además, creo en la Maestra. Tenemos que respetar su camino. Más importante aún, en esta tarea de la secta, esas personas de la secta no dejarán que nada serio le pase a sus buenos brotes. Además de mí y Xiao Lan, no hay bestias espirituales en este segundo nivel que puedan representar una amenaza para la Maestra —se encogió de hombros. Sus alas blancas desaparecieron; ahora Xiao Li era como un zorro blanco normal.
—Esta es la primera vez que descubro que no eres tan molesto. No fue un desperdicio de recursos dejarte entrar —Xiao Yun reflexionó un momento, luego dijo.
Xiao Li tenía razón; en esta gran Montaña Kunlun, la gente de la secta ya había enviado a sus personas para proteger a los novatos. Mientras los novatos persistan con esfuerzo, es solo cuestión de tiempo antes de que completen su prueba.
—Por supuesto, soy un zorro tan encantador, inteligente y hermoso. ¿Cómo podría ser un desperdicio que la maestra me aceptara? Es su fortuna de toda la vida encontrarse conmigo. Nadie tuvo tanta suerte como ella; ¿no lo crees así, Jefe Yun? —Xiao Li se jactó descaradamente mientras movía su cuerpo encantadoramente, tratando de mostrar su gran imagen.
La cara de Xiao Yun estaba azul, mientras que Xiao Lan se giró en otra dirección y pretendió que no conocía a este zorro.
—En el pasado, esas personas me rogaban que fuera su bestia contratada y prometieron criarme bien con ricos recursos; desafortunadamente, ¿quién soy yo? ¿Por qué debería aceptar su oferta? —Xiao Li dijo con confianza, fingiendo no ver cómo los semblantes de las dos bestias se oscurecían más y más.
—Estaban ciegos —Xiao Yun respondió sin expresión.
—... —El zorro se quedó atónito sin palabras mientras el cuerpo de Xiao Lan temblaba tratando de no reír.
....
Fuera del Pequeño Mundo Etéreo
Ha pasado otro mes. Cinco días más y será la fecha límite que el anciano Li le ha dado al novato para escalar la montaña.
—Hasta ahora, no muchas personas han podido alcanzar el tercer nivel de la Gran Montaña Kunlun.
—De los cinco mil novatos del Dominio Interno y el Damian Externo, alrededor de tres mil personas alcanzaron el primer nivel de la Gran Montaña Kunlun.
—Mil personas llegaron al segundo nivel de la Gran Montaña Kunlun, mientras que el número de personas que alcanzaron el tercer nivel a tiempo fue menor a veinte.
—Huang Ying Yue, quien alcanzó el tercer nivel de la Gran Montaña Kunlun, miraba al pequeño número de personas que descansaban bajo el árbol.
—Esta tarea de la secta fue extremadamente difícil. No muchas personas podrían alcanzar este paso. Entre 5 mil novatos, ni siquiera más de 20 llegaron a este tercer nivel de la Gran Montaña Kunlun en este período de tiempo —se quejó un guapo joven de alrededor de 16 años mientras se sentaba en la tierra sin ninguna imagen.
—¡Debería haberme quedado con mi familia para no tener que sufrir tanto con esta estúpida tarea! ¿Cuántas veces he cambiado de ropa? —sonó otra voz arrogante de una chica de alrededor de 17 años mientras la dueña de la voz llevaba un exquisito vestido de hanfu, aunque el vestido parecía estar roto en algunos lugares.
—Baja la voz; ten cuidado de que no te echen de la secta. Aquí, no puedes ser presuntuoso y mostrar este tipo de actitud arrogante. A la gente de la secta no le importará el poder de tu familia. Todos aquí son iguales —dijo un joven de alrededor de 14 años fríamente y frunciendo el ceño en desaprobación de esta chica mimada. Sacó una botella de agua de su anillo espacial y luego ignoró el rostro azul de la chica mimada.
—Inesperadamente, la escena aquí no es como la imaginé. Ahhh, estoy tan exhausto y hambriento; afortunadamente, mis padres prepararon todo para mí —murmuró un chico regordete de alrededor de 16 años, luego sacó una bolsa llena de comida de su anillo espacial para comer bajo la sombra del árbol.
—¡Ruidosos! —sonó una voz fría. El dueño de la voz era un hermoso chico en un limpio vestido blanco de hanfu que se sentaba lejos de otras personas. Tocó sin expresión su arete blanco. Parecía desdeñar el contacto o la conversación con cualquiera.
—Cuando su voz resonó, todos parecían estar en silencio; incluso la chica mimada cerró la boca por miedo.
—¡Hmp! —Huang Bai Xing no se sabía cuándo había llegado; bufó y se paró en la rama del árbol mientras abrazaba sus manos y miraba fríamente a todos.
—Tan Zi Mo se sentó despreocupadamente bajo el árbol ignorando a todos.
—¡Hmp! —sintiendo la llegada de Huang Ying Yue, levantó la cabeza para mirarla por unos segundos, luego giró su cara en otra dirección arrogantemente.
—Huang Ying Yue "...."
—Ahora ella podía ponerse en contacto con sus compañeros en el Pequeño Mundo Etéreo. No había tenido tiempo de comunicarse con ellos cuando muchas miradas cayeron sobre ella.
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Huang Ying Yue miró alrededor e ignoró la mirada desconocida de todos y los fríos ojos de Huang Bai Xing sobre ella.
—¡Hermana! —Huang Wan Yan no se sabía cuándo había llegado frente a ella; la abrazó fuertemente como si no la hubiera visto en diez años.
—¿Cuándo llegaste aquí? ¿Estás lastimada en algún lugar? —preguntó mientras tocaba su suave cabello de color orquídea púrpura.
—Hace una semana. ¡Estoy bien! —Huang Wan Yan enterró su hermoso rostro en su delgado cuello.
El cálido aliento tocó su cuello, haciendo que su piel blanca se tornara un poco rosada.
Revisó que Huang Wan Yan estuviera bien, luego lo soltó y miró a la gente que se presentó aquí; la mayoría de ellos parecían ser del Dominio Interno. Estas personas parecían ser una fuerza poderosa.
Solo Huang Ying Yue, Huang Wan Yan, Huang Bai Xing y Tan Zi Mo presentes aquí eran del Dominio Exterior.
—Mmm —Huang Bai Xing miró con frialdad mientras sus ojos parpadeaban con una luz asesina. Inesperadamente, esta basura podía escalar hasta aquí.
{Ja... esto será divertido. Cuanto más alto subas, más miserable serás cuando te arrastre de tu lugar orgulloso. ¡Te dejaré ver mi poder!} Huang Bai Xing pensó fríamente.
—¿Quién permitió que esta mendiga apareciera aquí? —frunció el ceño la chica en el exquisito vestido de hanfu mientras miraba de arriba abajo a Huang Ying Yue.
Huang Ying Yue miró su propia ropa desordenada y de color marrón como la de una mendiga, luego torció los labios.
Ignoró las duras palabras de la chica mimada, luego caminó hacia el frondoso bosque para encontrar un lugar tranquilo en el que bañarse y cambiarse. Creía que habría un lago o estanque aquí.
La chica mimada "....."
—¡Oye, cómo te atreves a ignorar a esta señorita! —gritó la chica detrás de ella y golpeó el suelo con el pie.
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