Por el camino, todos estaban en silencio y observaban los alrededores. Ahora se encontraban dentro de una inmensa cueva montañosa. La cueva no era luminosa. Había luces tenues que venían de la roca de arriba.
Había numerosas plantas extrañas, hierbas y flores a ambos lados de la cueva montañosa.
Los ojos de Shenlian YingYue se iluminaron. ¡Qué hermoso! Era como un paisaje nocturno donde la luz brillante se posaba en la oscuridad. Era difícil encontrar este tipo de paisaje fascinante en los tiempos modernos.
Se enamoró del mundo de fantasía y de las cosas fantásticas que había aquí. No tenía memoria de sus ocho vidas anteriores.
El recuerdo más claro para ella era su novena vida en el tiempo moderno en la Tierra. Los otros recuerdos no eran claros para ella. Por lo tanto, su sentimiento por la Tierra era un poco especial.
—Xiao Lan, detente un minuto —dijo Shenlian YingYue emocionada.