La identidad de Keira no era algo que necesitara mantener en secreto.
No tenía la intención de ocultarla a su equipo.
Mientras no hubiera ningún anuncio a gran escala, debería salvarla de problemas innecesarios.
Entonces, cuando Jalen percibió que algo andaba mal, decidió simplemente ser honesta.
Al oír sus palabras, Jalen se sorprendió.
La miró a Keira con incredulidad.
Luego soltó una carcajada. —Sí que tienes sentido del humor.
Keira no sabía qué decir.
Jalen dijo —Puede que no haya conocido al Dr. Sur, pero estoy seguro de que para tener talentos académicos como él, hay que tener al menos cuarenta años. No puedes engañarme.
Keira contrajo la comisura de sus labios. —No, en serio, yo soy el Dr. Sur.
—Ja, ¿así que pensaste que decir eso eliminaría mis sospechas? —Jalen la miró de arriba abajo, frunciendo el ceño—. No me digas que tienes una aventura con Samuel.
—¡Tienes una imaginación muy vívida! —dijo Keira.
—¡Pero qué cosa!
