Palabras del autor-san:
Originalmente no tenia planeado que esté capítulo fuera tan largo. Pero hay muchas cosas que necesito explicar, hasta yo lamento estar en este tipo de situaciónes, Pero es algo que necesito hacer, ¿Sabes?
La situación actual de Shirou es difícil, el tipo está en pánico y a la vez esta medio esquizofrénico con 7 planes en la espalda para tener alguna clase de ventaja. Necesito mostrar de alguna manera ese tipo de cosas o más allá de su mentalidad.
La acción iniciará perfectamente a fondo después de esta región, es decir, después del siguiente capítulo que quiero avanzar, así que, gg.
Cómo sea, los dejo con el cap~
(Al autor le dió pereza editar a Shirou, lamento esos problemas técnicos)
◇
[Sesión Nightmare]
—… de acuerdo, esto es, un problema.
Cistus susurro silenciosamente con nervios en su voz, observando por el rabillo de su ojo a su yo original que temblaba ligeramente.
—Cistus-sama, en este momento deberíamos estar más agradecidos por haber logrado escapar de las garras de Queen. —Está ves fue Carte la que hablo. En un pequeño tono de regaño.
—Si, lo sé, pero… ¿Por qué esta región?
—Bueno, pensé que llegaríamos a la octava región, pero esta es la séptima.
—Uh, ¿Hay algún problema con eso?
Pareciendo un poco preocupada por ver a Shirou temblando de rodillas, Hibiki acaricio su espalda mientras preguntaba.
—Realmente ninguno. Solo que el proceso para sobrevivir en la séptima región Netzach es a través de ganar puntos y dinero en-
—¡¡CASINOS!!
A la velocidad de un vehículo de fórmula uno, Shirou salto desde los brazos de Hibiki hacia un casino cercano.
La séptima región Netzach tenía una apariencia que solo podía ser descrita como bizarra. Por ejemplo, todos los relojes tenían los números del 1 al 5 removidos. Junto con varios casinos y lugares de apuestas para juegos de azar con luces de neón en los relojes y los carteles.
—¡Mierda! ¡Vuelve aquí maldita sea!
Cistus trato de tomarlo de su ropa lo mejor que pudo, pero el otro chico parecía haber aumentado su velocidad por la emoción. desde un lado a otro entre todas las casas de apuestas en el lugar, no dio ni una oportunidad para que alguien se acercará.
—Uh, Carte-san, ¿Podrías explicar mejor?
—… La séptima región Netzach tiene un proceso de vivir a través de las apuestas y los juegos de azar. Así que solo necesitas dinero y suerte para vivir aquí con toda la comodidad que quieras.
Mientras Carte explicaba, podía ver cómo Cistus trataba inútilmente de alcanzar la velocidad de Shirou. Ni siquiera lograba acercarse lo suficiente para tomarlo. De hecho, parecía estar llegando a la velocidad de aceleración de Aleph sin necesidad de usarlo en realidad.
—¡Ya quédate quieto! ¡Necesitamos ir con la Dominion!
—¡Espera un poco!
—¡No! ¡Si te dejo suelto en este lugar no vas a salir nunca maldito Ludópata!
—….. pensé que a Shirou-sama le molestaría un sistema como este, pero…
Después de algunos momentos de carrera, Shirou se detuvo cruzándose de brazos con un bufido molesto. Algo irritado por habérsele negado su entretenimiento. Cistus suspiro igual de irritado, y rápidamente tomo su brazo para arrastrarlo dónde sus acompañantes.
—¡Carte! Vamos con la Dominion ahora, mientras más pronto salgamos de aquí más pronto este idiota se calmara.
—Estas exagerando.
—Me da igual, ahora quédate quieto.
Ante la pelea del espíritu con su clon, Hibiki y Carte solo pudieron sudar.
—Disculpen.
Una voz nueva llamo la atención del grupo. Cistus dejo de agitar a Shirou y miro aún lado. Había una chica de cabello verde atado en una coleta y un traje de Maid. Rápidamente, su apariencia fue identificada unos segundos después por Hibiki, que le apunto con un dedo tembloroso.
—..T-tu eres, ¿Sakagure Yui-san? —Su reconocimiento hizo que alzara un momento la ceja.
—¿Sagakure Yui? ¿No eres tu la que murió en el juego de Doll Master?
—Ah, eso, supongo que podrían explicárselos en otro momento. Por ahora, necesito que me sigan, porfavor.
—Vengo de un lugar donde seguir a alguien desconocido de la nada no es recomendable, menos en lugares como estos.
—Esos son traumas de américa, yo.
—Me gusta verlos más como instintos de supervivencia.
O talvez eran ambas cosas, una frase dice que tú origen nunca sale de ti sin importar cuánto tiempo pase. No lo pensó demasiado en ese momento.
Aunque hasta cierto punto, no podía negar que tenía razón.
Si no fuera así, admitiría que talvez habría muerto en alguna ocasión anterior a ese momento.
—….supongo que es entendible. Pero me gustaría que entendiera que en esta región, el tipo de violencia como esa no es bien recibida.
—En una región que tiene que ver con las apuestas, pensé que sería algo recurrente….
—Medianamente lo es, pero ese no es el punto.
Con Yui dando una confirmación clara, Shirou sudo con desdén. En su propia experiencia no pensaba que la violencia sería poco recurrente en un lugar como ese, lo que de hecho, estaba en lo correcto.
¿Talvez las Cuasi Espíritus eran más susceptibles a la derrota por haber vivido tanto tiempo en el lugar?
Ni idea.
—Bueno.. ¿Al menos preguntar al menos donde nos llevarás?
—Por supuesto. La Dominion previo que ustedes llegarían aquí, eso gracias al contacto con las Dominions de las regiones anteriores.
—….¿Dominions anteriores?
En lugar de mantener su rostro estoico, y siendo informado por eso, Shirou rápidamente frunció el ceño con sospecha.
Ante eso, Yui solo le envio una mirada fría.
—Has causado caos dónde quiera que vayas. Aunque la Dominion de la novena región, Kirari Rinemu se puso de tu lado, los problemas que tanto tu como White Queen han causado son innegablemente un problema en el mundo vecino.
No había posibilidad de decir algo en contra. Probablemente la mayor parte de las desgracias de las que se refería eran culpa de Queen. Sin embargo, no había forma de refutar o dar pruebas de eso.
Así, Yui continuo.
—Sin embargo, mi hermana, Sagakure Yuri, la Dominion de esta región, está interesada en conocer a un espíritu en persona. Aunque es del tipo de científica loca, te pediré que ignores eso a favor de ir a la torre central.
—…..de acuerdo.
Sin más oportunidad para negarse, era preferible no agitar demás las aguas.
Yui agradeció inclinando ligeramente la cabeza. Luego hizo una seña con su mano para que la siguieran.
Aunque el escenario del cielo era el de un cielo nocturno, los edificios aquí estaban todos rechazando la noción de la noche. Incluso las Cuasi Espíritus caminando por la calle sostenían botellas de sake en sus manos. Jugaban con las botellas mientras cantaban vigorosamente.
—No hay mucho licor en otras regiones, pero eso es diferente aquí. Siempre que tengan PY, los residentes pueden hacer lo que quieran.
—¿PY?
—Es una abreviación para Puntos Yui.
—…es decir, ¿Hacer lo que quieran?
—Si, en esta región se sobrevive con eso. Además, hay unas leyes especiales para algunos tipos de apuestas.
Llamo su atención con eso. Encendiendo momentáneamente el interés del pelinegro que la miro con curiosidad.
—¿Leyes especiales?
—Correcto. Por ejemplo, podrías jugar un piedra papel o tijeras con alguien y usar una de las leyes. Una de ellas, es que todo se rige por un juego, así evitamos las agresiones. Otro ejemplo, es que usamos el Reiryoku para que todos los efectos de las apuestas se hagan verdad.
A cada palabra que Yui daba, su atención seguía incrementándose. Lentamente hasta que Hibiki comenzó a considerarlo peligroso. Especialmente por el brillo muy interesado en sus ojos.
—¿A qué te refieres con todos los efectos de hagan verdad?
—Digamos que tú haces una apuesta con alguien. Sea lo que sea, tienen que apostar algo del mismo valor, así que es imposible que alguien salga con menos. En segundo, esa misma apuesta puede hacer que los sentimientos o emociones de alguien cambien o ir más haya en cambiar sus costumbres, porque como dije, las reglas se obedecen. Así que son absolutas.
—¡Espera! ¡Espera! ¡Espera! ¡Espera!
Un ligero estremecimiento atacó a Yui después de terminar su explicación. Cistus había salido sorpresivamente de la sombra de Shirou, aparentemente habiendo escuchado todo. Además, tenía una mirada muy esperanzada en la chica.
—Entonces, si uso esas reglas. —Apunto a su espalda. Justo donde Shirou estaba mirando con sorpresa por su intromisión. —¿Puedo hacer que esté cabeza hueca tenga el ego o confianza en si mismo que una persona usual?
—…¿Qué?
En respuesta, el espíritu frunció el ceño y gruño.
—En términos simples, si. Pero tendrías que apostar algo que equivalga a todo el amor propio que se tiene.
—….. —Cistus se cruzó de brazos. Pensando en todas las opciones que tenía.
—Cistus, ¿Qué diablos tienes en la cabeza?
Por supuesto, Shirou no iba a quedarse quieto ahora que sabía eso.
—Yo, piedra papel o tijeras, ahora.
Con una afilada mirada, el clon extendió su mano en su dirección.
—…Me ni-
—Si no lo haces eres gay.
Toda su cuerpo se estremeció de cólera.
Era un hechizo simple pero inquebrantable.
—Oh si, olvide mencionarlo. El retado es el que tiene el derecho a elegir las reglas del juego.
—….
—….
—….
—…¿Qué vas a apostar? —Shirou pregunto.
—….mis derechos. —Cistus respondió, con una gota nerviosa.
—…..Como quieras~
Dando un suspiro sin más opción. Extendió su mano hacia el.
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—¿¡COMO MIERDA PUEDES HACER TRAMPA EN PIEDRA PAPEL O TIJERAS?! —Después de perder. Cistus rugió mientras tomaba el cuello de la camisa de Shirou.
La elección de Piedra papel o tijeras era porque se suponía que no había forma de hacer trampa. Siempre era un 50/50. Al menos, hasta ahora.
—Cistus, cállate. Para un pistolero como yo no es difícil ver los movimientos de los músculos de tu mano y adivinar que harás, ¿Quién diablos crees que soy? El ego que tengo lo tengo por una razón.
Con su ceño fruncido, Shirou explico con ligera irritación. Aunque internamente feliz por haber obtenido cualquier derecho sobre Cistus.
Mientras más obediente el clon, mejor.
—¿A-adivinar?
Entre murmullos inentendibles, lentamente soltó su ropa. Con un aura depresiva con el, su cuerpo fue absorbido por la sombra para esconderse de su vergüenza.
Con poco interés en la derrota de Cistus, Shirou alzo la mirada hacia Yui, quien miraba toda la interacción con curiosidad.
—¿Podrías fingir que nunca viste esto?
—Por supuesto. —Yui asintió ligeramente con educación. Lo que el correspondió.
Nuevamente, Carte y Hibiki miraron expectantes toda la interacción. Aunque acaban de decir que estaban en un lugar donde la suerte lo es todo, Hibiki tembló por un segundo al pensar en todas las capacidades mentales de Shirou.
Si una trampa significa perder, entonces, bastaría con no ser descubierto. Y para alguien que manipula el tiempo, de hecho no es tan difícil de hacer.
En medio de su camino, otra cosa llamo su atención. Una casa algo brillante que tenía un cartel de leer la fortuna.
Alzando un momento la ceja con sutil curiosidad, giro hacia un lado de dónde Yui los dirigía para entrar en el lugar. Y notando eso, Yui suspiro algo cansada, sin más opción, siguiéndolo con las otras dos detrás.
—¿Se supone que enserio es una adivina?
—Su ángel sin firma toma un poco de tu sangre y te da tu suerte y un poco de futuro. Dado que no sirve para la batalla, ha ganado un buen negocio aquí.
—Mmm~
Con un susurro silencioso, hizo aún lado las cortinas de color rojos con incrustaciones doradas. Encontrando a una chica que parecía mayor en el lugar, que inmediatamente lo miro con una sonrisa.
—Me enorgullece saber que un espíritu se haya interesado en mí negocio. Señor. —La mujer dijo, mientras Carte y Hibiki se sorprendían momentáneamente por detrás.
—…nada mal. —Susurro. Rápidamente sentándose frente a ella. —Bien, ¿Qué puedes hacer?
—Para un espíritu del tiempo debe ser poco Interesante alguien que vea el futuro, ¿Puedo saber porque quiso entrar aquí?
—Simple curiosidad. Además, veo y controlo el futuro, pero la suerte está más allá de mi.
—Bueno, eso es un asunto cierto. Serían 3000 PY si quiere jugar a esto.
Shirou se quedó quieto un segundo. Volteando detrás para mirar a Yui de reojo. Ella no tuvo problemas en entender el significado de su mirada, suspirando mientras sacaba una tarjeta del bolsillo de su falda.
—Bien~
La adivina ronroneo después de tener el pago. Insertando un pequeño tubo en el dorso de su mano, sacando una pequeña onza de su sangre acompañado de un pequeño quejido sorpresivo de su parte.
—…
—Perdón por ser así de sorpresiva, pero voy a necesitar esto.
—…no importa.
Asintiendo con una sonrisa, la chica coloco la sangre en un pequeño embace de agua que se tiñó de rojo.
—
Susurrando en voz baja el nombre de su ángel sin firma, el agua cambio de colores por algunos momentos. Minutos después, terminando de dos colores, morado y blanco con una transparencia en medio.
—Mmm~ parece que tus colores de la suerte son morado y blanco, Shirou. —Dijo con un tono divertido en su voz. Agitando ligeramente el embace sin que las aguas se combinarán. —Además, debo decirte que te encontrarás con una escena tétrica si de verdad logras salir de este mundo.
Shirou frunció el ceño por dos cosas. Uno, porque ella conocía su nombre, estaba seguro que nadie en el lugar lo había mencionado. Y segundo sobre lo último.
—¿Morado y blanco mis colores de la suerte? Puedo ignorar eso, pero pensé que sería negro, aún así no creo que sea importante. —Tosió, luego mirándola con mas frialdad, razón que hizo que la mujer sonriera más. —Ahora, ¿Escena tétrica al salir del mundo vecino? ¿Qué significa eso y que tanto puedo confiar?
—Eso no es algo que pueda decirte. No es mi responsabilidad. Un escenario como ese es mejor que lo descubras tu mismo.
El alzo la ceja con sospecha, pero pronto entendió que ella no diría nada aunque la amenazara. Aunque tampoco es que quisiera hacerlo, eso sería maleducado.
Suspirando sin más opción, se levantó y se inclino ligeramente en respeto.
Podrán ser cualquier cosa asesina, pero ante todo, un Tokisaki siempre es educado.
—Gracias por la información. —Murmuro.
—No hay problema. Vuelva cuando quiera.
Pensándolo bien, el morado significa realeza y el blanco elegancia. Ahora súmale, El "Emperador" del tiempo Zafkiel.
—(Si Kurumi se le nombra, la Reina del tiempo y las sombras…. ¿Eso me hace a mí el Rey?).
Por supuesto que si.
◇
—¿Podrías repetirlo?
Una bata de laboratorio encima de un vestido blanco. Era un estilo extraño ciertamente. Cada vez que abría su boca, sus afilados y serrados colmillos se veían brillar.
—Quieres ir a la sexta región Tiphereth, ¿No? En ese caso, te dejare pasar sin ningún tipo de conflicto si logras pagar 100 millones de PY.
—…. ¿Eso no es una cifra muy excesiva?
Por supuesto que lo era. Acababa de llegar a la región, así que básicamente su numero de presupuesto en ese momento era de 0. Y aunque pudiera aumentarlo con algunas apuestas, ese número estaba a años luz.
—Estamos hablando de transportarte a otra región, por supuesto que es posible, pero claro debe haber alguna condición a ello.
Yuri sonrió despectivamente, sus ojos lo analizaban de arriba abajo con curiosidad. Rodando en su silla coloco una mano en su barbilla, encontrándose con la irritación en sus ojos.
—La otra opción que puedo darte es dejarme analizar el cuerpo de un espíritu hombre.
—Denegado.
No era una opción. El único ser que tenía total permiso para tocarlo de esa manera era el mismo.
—Si, eso pensé. —Ella suspiro con decepción. Dejándose caer sobre su escritorio con un puchero en el rostro. —Esta es la puerta a la sexta región Tiphereth. Como puedes ver, en el lado
Chasqueando sus dedos, la pantalla detrás de Yuri cambió su imagen.
La vista familiar de una enorme puerta, la cual conectaba las varias regiones del Mundo Vecino una con otra. Derecho de la puerta había una ranura para monedas. como Yuri había dicho. La puerta estaba cerrada fuertemente por cadenas que estaban conectadas a un dispositivo similar a una ranura para Monedas.
—Cuando insertes PY aquí, las cadenas se desbloquearán y la puerta se abrirá.
Un breve silencio después de analizar la puerta con la vista, alzo nuevamente la ceja.
—¿Es posible abrirla a la fuerza?
—Supongo que podrías. Pero hay toda una lista de cosas que puedo darte de las cosas que saldrán más.
Si intentara abrir la puerta a la fuerza, el pasaje podría dañarse, lo que con el mundo vecino en guerra con Queen significaría un daño duro. O podría hacer que el Reiryoku se desbordara y sobrecargar la región.
—Yuri san, pero, no tenemos ningún PY en nuestras manos ahora. Incluso apostar está fuera de nuestras manos.
—Ah, no pasa nada. Para las personas que llegan a la séptima región Netzach, un préstamo sin intereses de 1 millón de PY puede ser obtenido desde el inicio. Es tu decisión si lo quieres tratar como capital o hacer más dinero al apostarlo.
—….Te dejaré esto a ti.
La mano de Cistus vino desde las sombras para atrapar la moneda.
—… Por cierto, si no compras o vendes las monedas en una transacción formal, un mensaje de error saldrá. Así que es inútil pensar en robar.
—Tranquila, nunca se me pasó esa idea por la cabeza. Tengo mis métodos para jugar.
—Me alegra escuchar eso, ahora que tienes un objetivo aquí, me gustaría hablar de un tema en específico contigo.
Shirou miro curioso el cambio de expresión en ella. De parecer algo feliz y burlona, se había movido a una más afilada. Cruzándose de piernas sobre su escrito, Yuri lo miro sin ninguna emoción en el rostro.
—¿Eres consiente de toda la situación del Mundo Vecino?
—…¿Situación?
Con lo poco de información que tenía, solo sabía que Queen había declarado la guerra. Aunque probablemente estaba recuperándose de su batalla mas reciente, pues el también estaba en ese proceso de recuperación.
—El Mundo Vecino esta dividido en cuatro facciones, cada una apoyando a alguien diferente, pero tres tienen un enemigo común, Queen.
Yuri explico, mientras Yui se movilizaba a colocar un dibujo sobre la mesa.
La forma del árbol Sephirot se vio. En forma de las 10 regiones que componían al mundo vecino.

—Uh, entiendo que el Mundo Vecino entro en guerra con todo el ejército de White Queen, ¿Pero que son esas facciones? —Hibiki pregunto, con una gota de sudor nerviosa en su mejilla. Intranquila por la situación.
—Es más simple de lo que parece. El ejercicio de Queen quiere empezar la guerra entrando desde la quinta región Gevurah, pero tenemos el problema de que una facción ya se encuentra ahí.
—…¿Podrías decirme más?
Yuri sonrió, complacida por su interés. Así que empezó a explicar de nuevo mientras apuntaba a la decima región con su dedo.
—Primero, está la facción de Queen que se compone por todo su ejército. Luego, está la facción del Mundo Vecino, creada por nosotras las Dominion y contiene a todos los Cuasi Espíritus que no apoyan a ninguno de los otros tres bandos.
—Correcto, ¿Y las otras dos?
Estaba nervioso.
Si el comentario de Carte sobre que había otro espíritu en la quinta región era cierto, entonces…

—La tercera facción, es básicamente toda la quinta región Gevurah. Estás apoyan a la espíritu mas reciente que apareció ahí hace algún tiempo. Dado que ella fue capaz de someter a Queen hasta cierto punto, se ganó la confianza de la región después de que ellas le dieran asilo.
—…. Es decir, ¿Se volvió la Dominion? ¿Sabes su nombre? —Su voz estuvo a punto de atorarse en su garganta.
—No lo hizo. La Dominion de la quinta región continúa ahí colaborando con ella, sobre lo segundo, aunque no estoy completamente informada, su nombre es Yatogami Tohka.
El se cubrió la cara, suspirando con nerviosismo. Alboroto su cabello con algo de preocupación, probablemente planeando 5 planes diferentes como precaución en ese momento.
—Shirou-san, ¿Estás bien? —Hibiki lo regreso al mundo.
—…si, eso creo.
En ese momento, no había muchas opciones, de todas formas. El objetivo de llegar a la quinta región todavía tenía que mantenerse.
—Pareces nervioso, ¿te dio un ataque de pánico?
—Tranquila, aún estoy perfectamente si quieres una cita. ¿Cuál es la última facción?
—Fu~ la última es la tuya claramente.
—…..¿Perdón?
—La facción que apoya al misterioso espíritu del caos. Son un grupo que nació gracias a Kirari Rinemu, y que se extendió por las regiones cercanas gracias a que se supo de tu victoria en el Battle Royale de la décima región.
—(….Rinemu a hecho mucho de las suyas).
Probablemente Hibiki también estaba pensando lo mismo. Internamente estaba un poco agradecido por ello. Afortunadamente, su reputación era más "limpia" de la que Kurumi había tenido, en realidad.
Por otra parte, Hibiki misma estaba agradeciendo en silencio a la rubia. Si no hubiera sido por ella, talvez la situación habría sido más difícil de tratar, pero para su propia suerte Shirou era el tipo de persona que prefería negociar y ahorrarse problemas.
Por las razones equivocadas, pero lo hacía.
—Entonces, las facciones son, Queen, el Mundo Vecino, las que siguen a la espíritu de la quinta región, y la ultima que sigue a Shirou-sama, ¿Correcto?
—Eso es correcto, pero me gustaría saber quién eres tu, siendo que te conozco de alguna parte… —Yuri Murmuró, mirando a Carte con curiosidad.
—Mi nombre es Carte a Jour, antigua Dominion de la Tercera región Binah antes de que Queen me la quitará.
—Entendible, tenga un buen día.
Yuri suspiro, aparentemente todo su interés se había esfumado en un solo segundo. Reclinándose sobre su silla y volviendo a mirarlo con algo de aburrimiento.
—Si con eso acabamos, entonces me retiraré.
—Espera un momento ahí.
—¿Uh?
Una voz nueva lo detuvo antes de dar un solo paso.
—Bienvenidas a la séptima región Netzach. Miyafuji Oka, Yukishiro Maya. —Yuri tranquilamente saludo a las recién llegadas. Con una nueva sonrisa en el rostro. Mas alegre y más tranquila.
—….
—… Un gusto conocerte, Tokisaki Shirou-sama. Mi nombre es Miyafuji Oka. Soy la Dominion de la sexta región Tiphereth. —Cabello castaño y ojos azules, una chica con educación saludo con una sonrisa.
—Dominion de la segunda región Chokmah… Yukishiro Maya. —La otra hablo con un tono más frío. Combinando con el cabello y ropa azul que llevaba junto a los lentes en sus ojos.
La tercera chica que había entrado por otra parte, parecía más interesada en dormir que estar en el lugar. Si se tomaba su vestido astral que era básicamente una pijama de cuerpo completo como referencia.
—Fuaaah… Mi nombre es Ariadne Foxlot.
—¿¡La Dominion de la cuarta región Chesed, Ariadne Foxlot…!?
Fue Hibiki quien gritó en respuesta a ese nombre.
Es decir, 4 dominions en el mismo lugar. Pobablemente tres de ellas eran del tipo combate.
—….Veamos, ¿Esto es una emboscada de 4 partes?
El se mantuvo tranquilo. Ya fuera por confianza o no, sus ojos repasaron rápidamente las tres figuras nuevas. Carte y Cistus moviéndose rápidamente a cada lado, listos para usar cualquier arma.
—No veas esto como una amenaza, Tokisaki. Intenta verlo como un tipo de medida de protección.
—¿medida de protección para ustedes? —Cistus se burlo. Su mano en su cinturón para sacar a Zafkiel en cualquier momento.
—Cuatro dominions, hostiles en mi contra después de que una estuvo siendo sorprendentemente agradable, que desgracia. —Shirou suspiro, cansado mientras se cruzaba de brazos.
—…No es necesario pelear. Solo quiero resolver algunas dudas.
Ariadne tomo la palabra. Bostezando con cansancio mientras aplastaba su almohada y está desaparecía en partículas. Mirando toda la interacción con apatía.
—Me agrada que alguien sea educado, adelante, mientras no sea nada personal.
Ariadne asintió.
—… ¿Qué es lo que buscas?
—Salir de este mundo. No creo que sea imposible para alguien como yo.
—… ¿Por qué te pareces una versión hombre y re coloreada de White Queen?
—Es al revés, ella es una versión re coloreada de mi. Y la razón, es que ella es un clon inverso que tomo esa forma, no estoy seguro del porque.
—… Has planeado avanzar desde la décima región Malkuth. ¿Qué tan lejos planeas ir?
—Hasta que mi meta sea cumplida, no sé qué tan lejos iré.
—… Así que resulta ser así. ¿Entonces tu meta es la misma que la de la White Queen?
Hibiki tembló por un momento. Eso talvez podría enojar a Shirou por compararlo con alguien. Aunque realmente no estaba completamente consiente de las emociones que Shirou sentía hacia Queen eran positivas o negativas, prefería no arriesgarse con ello.
Aún con ese riesgo, los transparentes ojos de Ariadne no estaban ni turbulentos ni huecos. Simplemente, estaban tan calmados como el mar.
—El punto en común entre tú y White Queen es su indiferencia hacia el Mundo Vecino. Porque no te importa, ¿correcto?
—Si, eso es correcto. Salvarlo tiene poco de mi interés.
Ariadne asintió, a punto de hacer otra pregunta, el la interrumpio.
—Sin embargo, ella está en mi camino. Y también otro ser que probablemente se metera en mi camino para salir de aquí. Así que eliminarla también es un objetivo pendiente.
—Pareces saber bastante sobre el mundo exterior, ¿No? ¿Cuál es esa razón? —Yuri llamo la atención, de brazos cruzados sobre su silla.
Pensándolo bien…
¿Había algún peligro sobre confesar?
—… porque vengo de ahí, por supuesto.
Las expresiones de todas saltaron a sorpresa. Carte se unio a eso. Hibiki y Cistus estaban básicamente igual. Solo fue Cistus que sudo un poco cuando la revelación salió de su boca, algo sorprendido por revelar algo de ese calibre.
(Yo, ¿estás seguro de esto?).
—¿Mmmm?
Shirou abrió un poco los ojos, estaba seguro que no había visto la boca del clon moverse, mirando sobre su hombro, Cistus suspiro.
(Yo hice esta modificación cuando me diste a Zafkiel. Te deje comunicarte mentalmente con clones, ¿Bien?).
—… (De acuerdo, eso es útil). —Tuvo que darle ese crédito.
—…¿venir de ahí?
—Por supuesto. Cai aquí por una razón que no diré. Por eso estoy tratando de regresar.
—Espera, si es eso, ¿Entonces conoces al hombre del otro mundo?
—Itsuka Shidou. 16 años. Estudiante de secundaria. Tiene el poder de sellar espíritus. Cabello azul, ojos marrones y un poco afeminado. Eso creo.
Básicamente acababa de vender a Shidou, pero tampoco es que ellas pudieran alcanzarlo de todos modos.
Así que
GG
—….Itsuka... Shidou. —Yuri murmuró.
—….
—Shirou-san…
—Calma. —Shirou murmuró, mirando a Hibiki por encima de su hombro de reojo. —Mantente detrás de mi y no te tocaran ni un pelo.
Las Dominion parecían estar un poco en trance, Shidou era un punto clave para que una buena parte de las Cuasi Espíritus no se volvieran Emptys, sin embargo todas apenas conocían su rostro, revelar más las había aturdido.
—…cómo sea, eso no tiene importancia. Entiendo eso, pero mientras esté aquí White Queen… necesitaremos monitorearte. Causaría complicaciones si actúas como te plazca dentro de nuestros territorios.
Oka fue la primera en recuperarse, agito su cabeza para salir de ese trance para señalarlo con un dedo.
Dando un vistazo pequeño, ella tenía un estoque en su cadera, probablemente su ángel sin firma.
—Ey, ey, ey, ey, ey, ey, soy una científica. Loca pero sigue siendo científica. ¡No quiero este tipo de conflictos aquí!
Yuri se levantó de su asiento, inquieta por ver que parecía que el fuego de la batalla estaba a punto de elevarse en medio de su oficina. La Yui al lado de ella también estaba lista para actuar, sosteniendo un kunai con fuerza en una de sus manos.
—… Mis disculpas, pero no me siento mal en lo absoluto. Después de todo, tienes un poder comparable al de White Queen. Es natural que nos esforcemos para evitar un alboroto.
—Es entendible, supongo.
—Bien, bien. Ahora que estamos calmados, Shirou, hay una propuesta que quiero hacerte.
Shirou alzo una ceja, Carte frunció el ceño y Hibiki se abrazo al brazo izquierdo del pelinegro. El primero interesado en lo que diría, las otras dos con preocupación interna.
—Una partida de apuestas por 50 millones de PY, tu obtendrás la otra mitad. Si ganas, puedes irte hacia la sexta región Tiphereth. Si yo gano, por favor, quédate aquí por un rato como un experimento. Por supuesto, los gastos de manutención se te serán dados y podrás irte a la sexta región Tiphereth después de que termine el experimento.
—… aunque no quiero preguntar, ¿qué tipo de experimento específicamente?
—Clonación, replicación y conversión en un cíborg, ¿estás interesado?
—Denegado. No voy a soportar ver una copia de mi cara y menos convertirme en una rata de laboratorio.
Soltó un bufido, mientras Yuri dio un suspiro decepcionado, dejándose caer en su escritorio.
—Pero, si Shirou-san es el que está siendo retado, ¿Por las reglas de la región, el tiene el derecho a elegir el juego o las reglas, correcto? —Hibiki tímidamente levanto la mano.
—Si, estás en lo correcto con eso. Y dado que es eso, ¿Te parece dos juegos?
—… ¿Cómo ganaría en ese caso?
—El mejor de dos. Si ganas el primero, pero pierdes el segundo, solo necesitas vencer a otra de nosotras, pero si vuelves a perder, es jaque mate, ¿Fácil no?
—De acuerdo, suena justo. —Shirou suspiro, aceptando esos términos. Primeramente, probablemente las otras tres dominions tenían poca o ninguna experiencia en apuestas, así que solo Yuri sería un peligro. Fuera de eso, el también era un apostador con experiencia, así que en cierto sentido era una ventaja para el. —Bien Yuri, jugaremos UNO en la primera ronda, dados en la última, ¿Te parece?
La mujer con bata de laboratorio sonrió complacida, riéndose entre dientes mientras asentía con alegría. Recargo su cabeza en su puño para mirarlo.
—Bien, bien, parece que tienes experiencia en este campo, Juju. —Ella volvió a reír. —Esta decidido en ese caso, puedes irte a conseguir los otros 50 millones de PY que te faltan.
—Solo una cosa más.
Shirou las interrumpió, ganándose una mirada un poco molesta de dos de las cuatro dominions en el lugar. Una de ellas, Ariadne escucho eso con pereza y desilusión.
—Apúrate, quiero dormir. —Ariadne se quejo.
—Si yo gano. —Shirou apunto aún lado, exactamente hacia Oka. —Quiero ir directamente a la Quinta región Gevurah, usaré los mandamientos de ser necesario.
Oka se sorprendió por un momento, sudando con algo de nervios justo después. Con los mandamientos de su lado, uno significaba que ambas partes darían un acuerdo mutuo en lo que apostaran algo del mismo valor.
En este caso, Shirou iria directamente a la quinta región si ganaba, y si perdía…. Pues sería una rata de laboratorio por algún tiempo.
Y claramente ni de broma quería lo segundo.
—…de acuerdo.
—Bien, bien, eso sería todo. —Yuri tarareo dando un aplauso. —Pueden retirarse, nos veremos en 5 días cuando tengas los 50 millones.
—…¿Qué? —Carte gruño.
—Oh si, ¿No lo mencioné? Desgraciadamente ya hicimos el pacto. Pero tendrás solo 5 días para reunir la mitad, lo siento, se me chispoteo.
Su sonrisa burlona y su tono, daban en claro que para nada era así.
—…bien jugado. —Shirou solo pudo murmurar.
◇
—¿Estas seguro que podremos hacer esto?
Ante la pequeña inseguridad de Cistus, Shirou asintió, acariciando la cabeza de Hibiki para calmar su inquietud.
—Me tengo la confianza suficiente.
—Pero solo tenemos 1 millón, necesitamos 50 veces esa cantidad en menos de una semana. —Aunque agradecida a los toques en su cabeza, Hibiki aún se sentía nerviosa.
—Mmm~ no has conocido la parte más ludopata de mi, así que solo espera y verás, ya tengo varias cosas en la cabeza.
Shirou sonrió audazmente. Colocando ambas manos en su cadera, miro hacia todos los casinos a su vista con un brillo depredador.
—Bienvenida al mundo de la negociación, Hibiki.