Kharoll estaba dentro de la biblioteca, y el primer pensamiento de él cuando estuvo en interior de ella fue "que inmenso, entrarían 10 dragones ancestrales", cada dragón ancestral medía de largo 25 metros aproximadamente, según cuentan las escrituras.
Con lo colosal que era la biblioteca, había grandes repisas llenas de libros que se categorizaban por el contenido que cargaban; Defensa personal, artes marciales, Maná, Poderes mágicos, Agilidad, Política, Historias, Leyendas entre otros muchos. Había de todo, absolutamente todo.
Kharoll buscó entre todas las secciones, entre eso quedó en la zona Mana, donde hubo un título que le interesó "El bello arte de controlar el mana", en la introducción decía que era un libro progresivo, que bien podía ser F-. como A+, dependía de la capacidad razonal, potencial y reserva de mana del lector, casi la gran mayoría lo han leído pero no lo han podido exprimir al 100%. como mucho al 25%, Kharoll lo puso en su bolso para llevarlo a su habitación y leer con calma, en la exploración de la colosal biblioteca, sorprendido por lo uno y lo otro,
Se perdió un poco, se quedó de frente de estanterías de misterios, sus ojos reposaron en un libro que dice " El que no se sabe mover bien pierde", Kharoll se quedó confundido, sacó el libro para ojearlo un poco, y era un libro de ¡sexooooo!, había poses, puntos sensibles de la mujer, zonas erógenas, puntos delicados, formas de maltratar de y dorminar a la mujer.
Kharoll anonadado y emocionado dijo; Bingo,
Encontré lo que no buscaba, pero aún así está en mis manos, ¿Obra del destino?, que se yo, pero lo tomo.
Respiro, se calmo un poco y fue a la parte de historia. Tenía unas fuertes intenciones de conocer a la antigua Reyna Génesis, quería saber que tan inmensurable era su poder.
Encontró libros, que contaban sus hazañas, matando dragones de una bofetada, destruyendo calabozos en días, masacrando ejercicios de monstruos, de demonios. Mil cosas increíbles.
Kharoll quería saber sobre sus últimos momentos, sobre el último respiro que dió la Reyna antes de partir,
No había ningún libro de su muerte.
Solo de el nuevo rey, y las extraña decadencia de la ciudad, desde el cambio de mandato, la corrupción de ser 1 o 0% incremento año a año un 5%, para 10 años después había un 51% de corrupción, todo lo dice en un resumen de un libro que llama "La triste historia de una ciudad inmortal que se marchitó", escrito por Stanley Goosen.
En una breve frase decía, "En el teatro de la sociedad, cuando el egoísmo y la idiotez ocupan el escenario, el telón final se aproxima con una tragedia inevitable."
Somos primates pensantes, con habilidades obsequiadas por el cielo, un ciclo infinito de creación y destrucción. No hay más opción, para que estos monos esten en paz, el cielo debe bajar y llevarse lo que les regaló.
Kharoll al ver tal filosofía narrada en poesía quedó enamorado, cogió el libro y marchó para rescatar a el hermano de Esther.
Pero antes de irse, quería revisar ese cuarto que vió cuando se entró por la ventana en el techo, salió de la biblioteca y subió.
Entro por la ventana y vio que la puerta estaba abierta,
Kharoll sorprendido, se quedó tieso, como una piedra, alcanzó a oír voces que venían de la escalera, como también del interior del cuarto.
¿Qué podía hacer en esta situación?,
Si lo encontraban, fuera decapitado por traición.
La sangre de Kharoll hervía, su corazón estába al máximo, la cara de él se hizo tan blanca como el azúcar.
Repentinamente...