Atrapado aparente callejón sin salida, como pájaro en jaula, sin posibilidades de volar.
Tan jodido está, que de la muerte se hizo amigo.
O eso pasaría si a Kharoll no se le ocurrió algo muy loco.
Saltar de su escondite, aprovechar el tiempo en el cual la gente está impactada al ver a Kharoll, para poder romper la pared con toda la energía, con toda la fuerza que el poseía.
Escapar en un sigilo tan bullicioso.
No había forma de que salga bien.
Pero igual. No es que haya una salvación si no hace nada.
Antes de cualquier cosa, uso su camisa como máscara para evitar ser reconocido. Una vez puesta la protección de identificación.
Entró en acción,
Respiró profundamente, tenso su cuerpo al máximo, soltó un poco de aire. El puño golpeó la pared y un hueco apareció.
La gente escuchó el ruido, se apresuraron para ver qué sucedía en un lugar tan importante dentro de la biblioteca Cambresh.
Para cuándo Kharoll soltó el segundo puñetazo. Hubo suficiente espacio para que saliera.
Y antes de salir. Un guardia lo agarró del zapato. Por obra y gracia del más allá el zapato se salio del pie de Kharoll.
Una caída libre de 40 metros.
Con la llama de sus dedos se intentaba agarrar de la pared para ir frenando la velocidad.
Cayó relativamente fuerte, lo suficiente como para ser entumecido por 2 a 3 segundos.
Pero él no le prestó atención a nada. La adrenalina a su máximo esplendor.
Miro al una docena de metros una alcantarilla.
No dudo y saltó ,
¡Pum !
Siguió, el dejó atrás los guardias.
Igual no había forma de reconocer a Kharoll llevaba la máscara.
Salió de la alcantarilla una media hora después.
Para ir al cuarto de él, bañarse, cambiarse e ir a salvar a el hermano de Esther.
Tal y cuál llegaron a la hora acordada.
Esther vio a Kharoll todo pálido. Entonces preguntó.
¿Te viste con el Diablo o por qué tan asustado?
Kharoll dijo con calma - es una técnica de arte marcial que consiste en llevar la sangre a las piernas, para tener cara de muerto y pasar desapercibido.
Esther se quedó, con una cara risona, desconcertada de la técnica y respuesta de Kharoll. Con una risa un poco molesta.
Kharoll serio dice: su querido hermano menor está secuestrado por una banda de pedófilos.
En base a lo última información de la ubicación de encuentran en "Inferis"
Un suburbio bajo, donde existe una densidad criminal que se algunos lo llaman. Las puertas al infierno.
Son las 3:00pm,
Tenemos tiempo, comenzamos a ir a Inferis, para crear rutas de escape.
Horas más tarde.
Siendo ya las 9:57 pm, múltiples rutas de de escape.
Zonas de refugio temporales habían sido colocadas.
En Inferis, hacia el sur, tocando una loma bien pronunciada. Estaba la base de los " Baja cierre",
10 guardias custodiando la entra.
4 guardias vigilando desde la punta del montículo.
15 guardias caminando por la zona sin sentido en busca de problemas
Había 2 caminos,
1er camino: matar todos los guardias de la forma más rápida y eficiente posible. Para evitar que alerten a los de a dentro. E ingresar a la base por la puerta principal.
2do camino; merodear la loma para ver si tenían un defecto la defensa de la base de ellos para entrar y salir en sigilo. Para bajar lq cantidad de peligro que sería la primera opción.
Kharoll dialogó con Esther un rato hasta llegar a escoger el segundo camino.
Merodearon como buitres volando en círculos hasta caer en su presa.
Luego de 4 vueltas. Los 2 entraron en una misma conclusión, en la sección oeste. Había una pared que no aguantaba así misma.
Estaba apunto de caerse.
Kharoll y Esther aprovearon, para sacar piedra por piedra con una situlesa nunca antes vista, cualquier error activaría las sospechas de toda la base.
Luego de turnos de 5 minutos, de acercarse a la pared extraer unas cuantas piedras, e esconderse porque las tondad de los guardias que estaban arriba . Vigilaban esa zona con poca frecuencia.
Paso 2 horas, 11:00 PM,
Listos para entrar, solo había que esperar el momento justo que el guardia termine de ver ahí. Para entrar. Llegó ese momento.
El hueco que tanto demoraron hacer fue lo suficientemente grande como para que ellos entren de lado,
Dentro de la base de los baja cierres una luz tenue había, taparon con una tela vieja la entrada para evitar que la luz del interior sea reflejaba afuera y los delatara.
Entraron fácil, salir todos vivos era la dificultad.
Kharoll y Esther sin conocer el edificio fueron juntos y en cada corte de esquina dejaban una señal entre la pared y el suelo.
A unos pocos metros se encontrsron con unos miembros de la banda. Kharoll y Esther estaban cerca de una habitación llena de explosivos. Entraron si hacer que la puerta hiciera mucho ruido, los soldados de los baja cierres pasaron, ellos hablaban de temas de mucha repugnancia, reían mientras decían con voz arrogante; que lindo es ver una mujer sufrir, mientras grita por ayuda. Que hermoso es ver cómo sus lágrimas pasan por su cuerpo indefenso.
El otro responde; ah pero unas se pone de boca sucia, a esas le rompo la mandíbula y les meto la verga para que se callen.
El compañero aclama sin escrúpulos; les pasa por putas. ¿Para que nos miran feo?
Kharoll tenía una sensación de partirles las piernas, y cortarles el cuello mientas se arrepentien de todo, aunque mejor sería apuntar sus extremidades y dejarlos sufrir hasta su muerte, sea agonizante, cada segundo se sienta como una eternidad.
Impulsado por el sus sentimientos, salió del cuarto , tiró su espada. Hacia la espalda del que estaba de lado izquierdo, se escuchó un grito que sonó; no Quiero morir ñaño, sálvame. No quiero morir. Disculpame
Kharoll entre sí dijo con enojo intenso; no ha pasado ni un segundo y ya está llorando, cobardía la de estás desgracia. con más razón muere.
El que estaba en el lado derecho se puso en posición de combate, listo para defender su vida. Vio a su enemigo, con un aura de sed de sangre. El sintió como su cuerpo se desconecto, las piernas temblaban y murmullo, alejate o grito por ayuda.
Kharoll aceleró el pasó, dió un salto hacia adelante, y antes que gritara lo atravesó con una daga. Que guardaba en su muñeca.
Soltó una bocanada de aire calientes. Vapor parecía.
Esther tenía miedo también, sintió la sed de sangre y ella dijo para si misma con temor:
Acaso es "hiems"? . Una liberación del instinto. Jamás había sentido algo tan horrible. Ni los inviernos más intensos había experimentado un frío tan violento.
Kharoll dijo con una voz fuerte y grave; sigamos.
Esther solo asintió la cabeza. Evitando cualquier conversa con Kharoll.
Pasillos tras pasillos. Giros tras giro, un laberinto parecía que estuvieran metidos,
Pero gracias a Dios, que había señales de los cuartos o de la zonas de la base de los baja cierres.
Llegaron en 28 minutos, docenas de guardias silenciados, antes de estos 2, se escuchaban risas , gritos, una fiesta.
Pero a medida que transcurría el tiempo , cada vez desaparecian voces sin explicación alguna.
Kharoll estaba enfrente de la celda del hermano de Esther, con unas llaves robadas de algún guardia de por ahí. Kharoll no se fijó solo comenzó asesinar. Con pensamientos Frívolos.
Kharoll le dijo con una voz indiferente; sal de aquí junto con tu hermana. Eres libre.
Igual que todos los niños que están aquí,
Salgan.
El hermano menor sintió el mismo frio o más fuerte que Esther, cuando miró a Kharoll.
Sin decir nada. Se levantó y corrió atrás de Esther.
Justo cuando se marchan. Se llega a escuchar un martillero en el suelo.
Los 3 se preguntan¿Qué está pasando?
No era que estaban martillando el suelo,
Venían más de 40 guardias marchando hacia la zona de la celdas, querían jugar con sus nuevos "amiguitos"
Kharoll dice a Esther, nos vemos afuera,
Sabemos el camino de vuelta.
Sal de aquí y nos vemos mañana en el gremio.
Esther paniqueada, asustada, sentía que estaban entre la espada y la pared.
Solo quería salir de ahí, demasiada presión para una princesa, más bien. Se sorpendia porque estaba ahí, en vez de llamar a la guardia real de su país por rescate.
Bueno ella aceptó lo que Kharoll decía, agarro de la mano a su hermano menor, habloó en voz alta y dijo síganm
Esther corrió con los niños y su hermano
Mientras que Kharoll dijo con enojo en voz alta; sus amiguitos están aquí ¡vengaaaaaaan!,
Los guardias escucharon eso y comenzaron a correr hacia la zona de las celdas.
Para encontrarse con todas la celdas abiertas y vacías
El líder de los Baja cierres dijo enfurecido;
Maldito desgraciado