—Conmigo cerca, ella no podrá llevársela —dijo confiada Mónica Baldwin—. Primero, tu deuda ha sido completamente saldada. Más aún, ahora tienes un ahorro de seis cifras en tu banco. Tu situación financiera ya no es un problema.
—En segundo lugar, ella tiene precedentes de haber abandonado a Coco.
—En tercer lugar, ahora es ella quien enfrenta una crisis financiera.
Al escuchar las palabras de Mónica, el Sr. Davis se sintió más tranquilo, porque la idea de que le quitaran a Coco hacía que la vida pareciese sin sentido.
Mónica miró al Sr. Davis. Este hombre realmente era demasiado bueno, o quizás demasiado débil, incapaz de proteger a los más importantes para él. La vida no se trataba de dar un paso atrás para abrazar al vasto mundo.