Después de que Nathaniel Hansen abandonó el hotel, arrastró su cuerpo pesado, deambulando por el flujo interminable de las calles. Así es cómo se siente la traición: vergüenza, bochorno, humillación, colapso, miles de sabores entrelazándose en una red.
Lo dio todo por Arianne Chadwick...
Había agotado a Monica Baldwin...
—¡Y aún así, este era su final! ¡Los sorprendió en la cama juntos! —pensó él—. Resulta que su devoción sincera era simplemente un juego para Arianne...
Así que...
Cuando Monica descubrió inicialmente su affaire con Arianne, debió ser este tipo de sensación, queriendo furiosamente desmenuzar a Arianne, deseando arrancarle la piel y sacarle los tendones, pero aún así no podía aliviar la ira porque era su inversión, su juventud.
Por Arianne, abandonó a Monica y a Natalia Hanson, renunció a todo, luchando por avanzar en su carrera... A cambio, Arianne estaba revolcándose en la cama con otros.