Discutimos que haríamos a continuación. Reik propuso avisar a la Alianza de los Siete Escudos sobre la traición de Vault y unir fuerza con ellas. Porque sabía que incluso si los cuatro uníamos fuerza, no podríamos contra el vault y su ejército de mercenarios.
Claro, ir a la Alianza de los Siete Escudos con la reina de los elfos oscuros..
¿Que podría salir mal?..
Pero siendo sincera, más opciones no tenía.
Buscar otros sobrevivientes de elfos oscuros estaba fuera de discusión, ya que incluso si lograra encontrar una cantidad decente de elfos, no harían mucha diferencia si sumamos las fuerzas de Vault con los recientes monstruos que se le unieron.
Así que sin tener mas opciones, estuve de acuerdo con su sugerencia. Entonces les dije que mañana guiarían el camino hacia la fortaleza mas cercana.
Todos tuvimos que dormir en el suelo, ya que la cabaña en la que nos encontrábamos no tenían camas.
Todos nos despertamos temprano por la mañana para partir lo antes posible a nuestro próximo destino. No pudimos desayunar casi nada, ya que los hermanos al rescatarnos ayer, dejaron la mayoría de sus provisiones y sus equipajes en el campamento temporal que habían montado cerca del castillo y mientras huíamos no tuvieron tiempo de pasar a recogerlo. Y para el día de hoy ya debieron haber descubierto su antiguo campamento.
Partimos al norte, hacia la cuidad gobernada por Alicia, una de las sietes Princesas Caballeros.
Cuando estábamos a punto de partir, Reik propuso cargarme y que su hermano cargara a Choel ya que el camino era largo y nos cansaríamos rápido y también podríamos llegar más rápido si nos cargaban.
Acepte sin pensarlo mucho, pero al parecer Choel, se sonrojaba con la idea de ser cargada por Luth. Podía ver qué tenía sentimientos ambiguos por él, ya que si fuera cualquier otro hombre, ella ya se habría negado.
En el camino Reik intento coquetear conmigo, al comienzo intenté ignorarlo, no era que no sentía nada por él, pero me daba vergüenza responder a su coqueteo frente a Choel.
Tomamos un descanso al mediodía mientras descansaba y tomaba poca agua, ya que no nos quedaba mucha. En eso se acerca Reik invitándome a una cita para ver los alrededores.
En respuesta solo le di una mirada en blanco y lo ignoré enojada, ya que alrededor de nosotros aún se podían ver escombros de lo que una vez fue mi territorio.
Más tarde siguió intentando coquetear conmigo y en eso descubrí que no tenía intenciones maliciosas cuando me invito anteriormente. Ahora que lo recuerdo parecía nervioso cuando me invito, pero aun así como castigo lo ignoraré y rechazaré sus invitaciones por 2 no 1 día, no mejor solo por el resto del día.
Al día siguiente, todo fue de costumbre comiendo los menos posible para ahorrar las pocas raciones que teniamos y el resto del dia Reik intentando coquetear conmigo, mientras su hermano Luth entrenaba cada vez que podía.
Reik volvió a invitarme al mediodía con la escusa de aprender magia de mí. Esta vez acepté su invitación, ni habíamos pasado unos minutos y comenzó a preguntarme sobre magia anticonceptiva y magia para bloquear el sonido. No aguante más por la vergüenza de sus preguntas y abandone la idea de tener una cita con el.
Así pasaron otros dos días, Luth y Choel entrenando ahora juntos. Choel en un momento se había unido al entrenamiento de espada. Mientras tanto Reik la pasaba coqueteando, le pregunté si no entrenaría como su hermano a lo que me respondió que ese nivel de entrenamiento ya no le servía casi nada.
Al séptimo día, al fin salimos de lo que una vez fue mi territorio. Por fin podíamos ver árboles y arbustos de cierta altura y señales de vida animal.
Al parecer la suerte estaba con nosotros que logramos encontrar una cabaña abandonada, al fin no tendríamos que seguir durmiendo al aire libre. Como elfo no tenía problemas con dormir libremente en la naturaleza, pero como la Reina que una vez fui, prefería dormir en una habitación de lujo , pero ahora mismo me conformaba con que hubiera una cama en la cual dormir.
La cabaña contaba con 5 habitaciones y había raciones de comida que habían dejado los antiguos dueños, estaba cayendo la noche, una vez de revisar que todo fuera seguro nos pusimos a dormir. Nadie hacia turno al dormir, ya que desde el segundo día mi magia se había recuperado lo suficiente para lanzar un hechizo que serbia para alertar si un enemigo se acercara a nuestra posición.
Estaba dormida cuando me desperté por el sonido de la puerta de mi habitación abriéndose al comienzo entre en pánico hasta que vi quien era. Como elfo oscuro pude ver el rostro de la persona que abrió mi puerta incluso en la oscuridad ya tenía una idea de porque había venido a mi habitación en medio de la noche.
Deber de sentirme disgustada o rechazo a sus intenciones, me sentía emocionada a lo que estaba por suceder.
Entro a mi cama y en eso nuestras miradas se conectan, no vi sorpresa en su rostro por saber que lo había descubierto. Parece que ya sabia que no podría entrar sin que lo descubriera o simplemente no le importo.
Me inmoviliza en la cama y comienza a tocar todo mi cuerpo, después de tocar mi cuerpo por unos minutos me desnuda y cuando estaba a punto de entrar dentro mío le pregunto: ¿Por qué?, a lo que responde que le gusto y con eso, dejo que seamos uno.
Si hubiera querido no había podido tomar mi virginidad, ya que tenia hechizos de protección, pero con el tiempo que estuvimos viajando logre conocerlo mejor. Sé que lo conozco de tan poco tiempo, que debía haberme tomado más tiempo en conocerlo, pero no pude evitar enamorarme de él en este pequeño transcurso de tiempo.
Así que sin pensarlo le entregue lo más importante que había estado protegiendo durante estos cientos de años. Si estuvo bien o mal la decisión que tome, solo el tiempo lo dirá