Este capitulo contiene ciertos momentos que pueden generar incomodidad en algunas personas, por otro lado, se pide que recuerden que Minoru ya tiene experiencia previa en combate y una persona normal difícilmente le daría pelea, sobre todo si se utiliza ataques sorpresa
Aparte de eso... disfruten y comenten :D *Inserte gatito mandando un corazón*
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Rápidamente los años pasaron y finalmente habían pasado 11 años desde que Minoru reencarno en este mundo junto a su extraño sistema, cada día entrenándose de manera oculta para poder sobrevivir a lo que sabría que llegaría en el futuro, ya sea que decida reencarnarse una vez más para ir al mundo principal del que se trataba la historia original o para quedarse y sobrevivir la tragedia que sabia que algún día llegaría
Sin embargo, en este preciso momento, el pelinegro se encontraba suspirando con cansancio mientras observaba a su celular en silencio, actualmente vestido con una sudadera negra y unos pantalones jean azules junto a un par de zapatillas de color negro con detalles blancos
- ...Me pregunto si de verdad ocurrirá... - se susurró para si mismo, observando con atención un vídeo donde se encontraba una chica de su misma edad que actualmente parecía encontrarse en clases
Aquella chica era una niña de cabello negro largo que caía por su espalda, tenia unas cejas finas del mismo color de su cabello mientras que sus pestañas eran largas y curvas, atrayendo la atención a sus tiernos y grandes ojos negros, su nariz era pequeña y respingada mientras que sus mejillas tenían un leve tono rosáceo que combinaba a la perfección con sus pequeños labios rojizos
Debido a que estaba en horario escolar, la chica se encontraba utilizando una camisa blanca que se notaba ligeramente bajo su blazer negro, usando una corbata roja y vistiendo una falda negra que le llegaba ligeramente bajo las rodillas, revelando sus medias negras y sus zapatos blancos, siendo este la vestimenta que todos los estudiantes restantes alrededor suyo también compartían, intercambiando las faldas por pantalones para los varones
En general, la niña solo se podría describir como una ternura que seguramente crecerá para convertirse en una bella mujer que haría que más de uno girase la cabeza para verla por segunda vez al caminar por las calles, sin embargo al pelinegro aquello no le importaba mientras soltaba otro suspiro de cansancio
- Akane Nishino... Actriz infantil popular que lentamente esta ganando un mayor numero de fanáticos debido a su crecimiento... En la novela original se menciona que fue raptada una vez en la secundaria y otra vez al los 16 o 17 años, pero nunca mencionan exactamente el momento de su primer secuestro... Por los spoilers que leí, también se vuelve una salvadora o algo así luego que la tierra sufriera una catástrofe que genero magia y monstruos aquí, pero no estoy muy seguro de si todo esto será correcto considerando que soy yo el que esta aquí y no el Minoru original... - murmuro para si mismo, cerrando sus ojos y soltando un suspiro hasta que oyó una voz tras él
- Niño? Estas bien? - preguntó una señora luego de aparentemente haber oído los murmullos que Minoru decía para si mismo, haciendo que el niño girase la cabeza para verla sobre el hombro, parpadeara levemente antes de mostrar una sonrisa y asentir
- Si, gracias señora - comento con una sonrisa el pelinegro, girando la cabeza una vez más mientras veía a su celular, dando una ligera mirada lateral al panel que se le había aparecido repentinamente
[Poliglota]
[Descripción: Habilidad compuesta otorgada a aquellos que han superado el nivel 50 en más de 3 idiomas]
[Otorga: Mejora a la capacidad de hablar, entender, escribir y procesar diferentes idiomas]
[Requisitos previos: Haber superado el nivel 50 en más de 3 idiomas]
[Obtenido: En la primera vida del usuario al aprender varios idiomas para ser capaz de cumplir sus sueños de asesinato de manera global]
[Lista de niveles:
1.- Español: 90/100
2.- Ingles: 87/100
3.- Japones: 70/100
4.- Portugués: 68/100
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???.- $#"/(&%: no aprendido]
[Advertencia: A menos que el usuario piense activamente en el idioma que quiera hablar, aquellos sin la habilidad poliglota solo serán capaces de entender un galimatías debido a la combinación constante de idiomas en el cual se presentarán con mayor regularidad palabras correspondientes al idioma con mayor maestría]
Leer aquello genero una pequeña sonrisa en el rostro del pelinegro, permitiéndose una ligera felicidad al notar el aumento en su manejo del Japones a la vez que tarareaba suavemente al notar la enorme lista que siguió bajo el Portugués, reconociendo, e incluso teniendo algunos niveles, en otros idiomas terrícolas mientras que había nombres tan extraño como el ultimo en la lista al cual ni siquiera sabia como llamarlo
Tarareando para si mismo, se permitió dejar de pensar en el japones una vez más, permitiendo que sus murmullos solo sean entendibles para si mismo y así evitar cualquier tipo de filtración de información sensible a cualquiera que pudiese llegar a oírlo
Concentrándose nuevamente en su celular, lentamente decidió manipular el dron cámara que estaba utilizando, alejando la cámara, revelando que el dron en realidad se encontraba decenas de metros de distancia de la escuela, previo a manipularlo para acercarse al establecimiento y empezar a sondear los alrededores de la escuela, finalmente frunciendo levemente el ceño al notar a un hombre oculto en un parque cercano mientras utilizaba unos binoculares, observando directamente hacia la ventana por donde se podía ver a Akane
- Supongo que encontré a mi secuestrador, uh... - susurro, poniéndose de pie y empezando a caminar con calma en dirección a la escuela que había estado observando previamente, tomándose su tiempo para caminar con calma absoluta a la vez que llevaba sus manos a los bolsillos, sintiendo un par de objetos metálicos ocultos
Llegando a la escuela el pelinegro tarareo para si mismo mientras evitaba entrar a la vista del secuestrador que se encontraba a varios metros de distancia, tarareando para si mismo mientras se apoyaba en una casa cercana a la salida principal del edificio estudiantil
Minoru sabia, con mucha claridad, que la solución más rápida seria simplemente alertar a la policía o incluso enfrentar al posible secuestrador antes que el delito ocurriera, sin embargo, también era perfectamente consciente que aquello podría ser peor para Akane a largo plazo
- En el anime... Cuando la secuestraron, ella se veía asustada, si, pero no parecía al borde de un colapso mental como lo tendría cualquier otra persona... Esto también podría ser algo fundamental para su personaje si ella se termina convirtiendo en la salvadora de la tierra como decían los spoilers, pero no puedo estar seguro... - pensó antes de gruñir para si mismo con molestia al recordar como fue incapaz de continuar leyendo la novela original, permitiéndose un leve momento para enfurruñarse antes de suspirar y recuperar su calma, dándole una leve mirada a su teléfono para comprobar que el posible secuestrador siguiera acechando a Akane a la vez que comprobaba la hora
- Mamá y papá estarán furiosos cuando descubran que falte a la escuela hoy... - pensó, suspirando levemente al recordar al dúo de adultos que, con el paso de los años, se habían ganado un espacio en su corazón junto a los padres que había tenido en su primera vida pese a que tratase de no enorgullecerlos ni molestarlos con regularidad debido a que no deseaba que ellos se apegarán tanto emocionalmente a si mismo debido a que aún no estaba totalmente seguro si seguiría el camino que Minoru había seguido en la obra original
- Aunque, bueno, para alguien que aún no sabe si irá a ese mundo de fantasía, ciertamente me estoy preparando mucho para ello... - pensó con un ligero resoplido, recordando algunas habilidades que había adquirido y que solo serían útiles en el otro mundo
- Pensando en ello, quizás deba revisar todas mis habilidades cuando llegue a casa... Debería darles una revisión para comprobar si hay algo nuevo o no - murmuro antes de tararear y alejarse lentamente de la pared en la que se estaba apoyando, notando la hora y a su vez notando como el posible secuestrador parecía empezar a moverse y prepararse
Estirándose ligeramente mientras caminaba por el camino lateral de la escuela, Minoru empezó a tararear una cancioncilla aleatoria a la vez que caminaba aparentemente distraído, observando de manera discreta a la niña pelinegra que lentamente salía de la escuela, permitiéndole empezar en silencio su cuenta atrás planeada a la vez que retrasaba levemente su paso, finalmente llegando frente a ella a la vez que la niña salía por completo de la escuela, haciendo que ambos chocasen ligeramente entre ellos
- Lo siento - murmuro Minoru, dándole una ligera mirada lateral a la chica que centro su mirada en sus ojos, casi como si fuera totalmente natural
- No hay problema - replico la niña con una ligera sonrisa, sin siquiera haber notado como Minoru había hecho un ligero movimiento de manos mientras ambos se veían a los ojos y compartían su breve conversación
Asintiendo levemente, Minoru giró su cabeza y siguió caminando con calma, permitiendo que Akane continuara su propio camino luego de una breve pausa
- Ella es buena... Mi habilidad de reconocimiento de mentiras es nivel 30 y casi me creo su sonrisa y su comportamiento... Es sorprendente que sea así de buena considerando que es una chica joven sin mi sistema o conocimientos futuros o una vida pasada como yo... - pensó Minoru, recordando en silencio la sonrisa y la actitud amigable y madura que había mostrado Akane en aquel simple intercambio, siendo que el pelinegro apenas había sido capaz de reconocer la falsedad en su acto
Sacudiendo la cabeza para si mismo, nuevamente volvió la mirada a su teléfono, tarareando para si mismo mientras observaba con tranquilidad como el hombre se acercaba a Akane desde atrás mientras la chica caminaba sin siquiera percatarse, solamente pudiendo soltar un grito ahogado cuando el hombre la sorprendió y la abrazo por la espalda, presionando un paño húmedo contra su cara y lentamente haciendo que la niña cayera dormida en sus brazos
- A trabajar, supongo - murmuró para si mismo el pelinegro a la vez que ordenaba a su dron que volviera a su hogar, permitiéndose estirarse levemente mientras abría una aplicación diferente en su celular y revelaba un mapa donde un punto rojizo parpadeaba justamente donde el suceso acababa de ocurrir, lentamente moviéndose a una dirección desconocida
- Esa chica debería agradecer que en mi vida pasada pensé que quizás necesitaría ser capaz de crear localizadores, drones y más cosas por el estilo para poder perseguir a quienes quiera matar... Aunque nunca haya usado ese conocimiento hasta ahora - Pensó para si mismo mientras se adentraba en un callejón cercano, caminando hasta el fondo del lugar antes de notar un maletín infantil del rayo Mcqueen oculto a menos que te acercaras lo suficiente, permitiéndose sonreír mientras lo abría y tomaba un cubre bocas metálico de color negro platinado, un bastón bo extensible y un cambio de ropa que consistía en una remera negra, un largo saco negro y un par de pantalones tipo buzo del mismo color negro
- Gracias a todos los ladrones y violadores que asesine hasta ahora por haberme financiado tan bien, ahora utilizare con mucha alegría sus ofrendas para mi - susurró con un ligero ronroneo en su tono, mostrando una sonrisa que mostraba sus dientes blancos y que lo hacia parecer casi animal ante la vista de cualquiera
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Ella sabía que no era normal, de hecho, lo ha sabido desde hace mucho tiempo
Desde que tuvo memoria ella siempre había estado en el mundo de la actuación, ya sea apareciendo en algunos anuncios ocasionales o incluso teniendo un papel leve y breve en algunas películas o series de televisión, ella había participado desde siempre en aquellas actividades
Todo aquello la había vuelto sorprendentemente famosa a una muy joven edad, y había perdido la cuenta de cuantas veces había oído a los adultos a su alrededor susurrar sobre ella
Sin embargo, toda aquella fama, pese a que mucha gente podría quererla, para ella misma era simplemente... molesta
- ah... Otro niño que quiere acercarse a mi para saber más sobre mi próxima actuación... - pensó de manera aburrida y sorprendentemente madura mientras observaba al chico de su misma edad que actualmente se encontraba frente a ella, aparentemente hablando con emoción y admiración sobre algo que fue incapaz de alcanzar los oídos de la niña pelinegra que, pese a sus pensamientos aburridos y desinteresados sobe el infante frente a ella, mostraba una sonrisa casi angelical y extremadamente amable
- ...eres increíble, Nishino - comentó el infante, aparentemente habiendo finalizado su perorata a la vez que la niña pelinegra le ponía una breve atención
- gracias por apoyarme tanto - comentó Akane mientras sonreía más brillantemente, de manera casi divina a la vez que ocasionaba que el niño frente a ella sonriera más tímidamente y se sonrojara levemente, haciendo que la niña suspirara mentalmente
- oye... Quisieras ser compañe... - habló el niño de manera rápida y tímida luego de unos leves segundos, viéndose interrumpido cuando la campana sonó y alertó el final del día escolar
- Lo siento, hablamos mañana, si? Mis padres me esperan en casa - Comentó Akane, poniéndose rápidamente de pie a la vez que recogía sus cosas y se alejaba del lugar, dejando tras de sí al chico que solo atinó a asentir renuente
Caminando rápidamente a través de los pasillos de la escuela secundaria en la que actualmente estudiaba, Akane se permitió soltar un leve suspiro al notar que no había nadie alrededor, permitiéndose dejar de sonreír por un leve segundo antes de tomar una profunda respiración y cerrar sus ojos mientras seguía caminando de manera automática fuera del edificio
Sin embargo, debido a que su paso era ligeramente apresurado y sus ojos estaban cerrados, fue incapaz de evitar chocar levemente contra alguien en su camino, haciendo que abriera sus ojos con rapidez y mostrara su falsa sonrisa de manera casi instantánea
Mirando frente a ella, pudo ver que aquel con quien había chocado se trataba de un niño de su misma edad, cabello negro brillante ligeramente largo que caía hasta sus hombros, cejas negras afiladas sobre sus profundos ojos negros decorados por sus largas y ligeramente curvadas pestañas y finalmente una nariz recta sobre sus labios rosados que lentamente se abrían
Sin embargo, pese a que normalmente Akane hubiera sido la primera en hablar para así evitar cualquier tipo de problema que pudiera generarse en caso la otra persona fuera del tipo molesto, la pelinegra fue incapaz de reaccionar apropiadamente debido a que pudo notar en los ojos del chico una falta absoluta de admiración, fanatismo, desprecio o cualquier tipo de emoción que estaba acostumbrada a ver, ya sea en sus fanáticos o en otros actores infantiles y personas generales de su entorno artístico
- Lo siento - oyó murmurar al chico mientras ella tenia su mirada fija en sus ojos, demasiado embelesada al notar la falta de interés que el chico parecía mostrar por ella
- No hay problema - respondió de manera automática, solamente ganando un ligero asentimiento por parte del pelinegro previo a que se retirara, permitiendo que la chica le diera una ligera mirada a su espalda antes de decidir continuar con su propio camino rápidamente
Tarareando mentalmente, la pelinegra simplemente siguió caminando por un breve tiempo, extrañamente sintiendo su corazón latir velozmente y su estomagó hundirse tras cada paso que daba, como si su propia existencia le estuviera alertando sobre algún peligro inminente
Tragando silenciosamente la saliva que se había acumulado en su boca sin siquiera saberlo, Akane dio una ligera mirada a su alrededor, apretando ligeramente los dientes al notar la falta de personas en sus cercanías, lo cual era la razón por la que normalmente caminaba por ese camino en especifico pero ahora queriendo maldecirse a si misma debido a su creciente miedo aparentemente sin motivo
Apresurando ligeramente su andar, pronto Akane se vio arrastrada a una calle lateral de manera repentina, haciendo que rápidamente abriera sus labios con el deseo de gritar de pavor pero siendo silenciada rápidamente con un pañuelo que poseía un aroma ligeramente dulce
- Tranquila mi dulce Akane... Pronto todo estará bien... - susurro una voz masculina ligeramente nasal a su espalda mientras la pelinegra trataba de forcejear desesperadamente, pateando, gritando ahogadamente contra el pañuelo y usando sus uñas para arañar la mano del hombre, llorando de impotencia mientras trataba de escapar hasta que, lentamente, su mundo se torno totalmente oscuro
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- Do...donde estoy...? - murmuró Akane apenas despertar, abriendo levemente sus ojos mientras veía borrosamente el techo grisáceo de la habitación
Girando su cabeza con lentitud y torpeza, Akane tardó un par de segundos en reconocer lo que había en una de las paredes de la habitación, haciendo que parpadee suavemente con la intención de eliminar lo borroso de su visión, lamentándose profundamente cuando finalmente fue capaz de ver lo que antes parecía solo un cúmulo de colores incomprensibles
Ahí, en la pared opuesta a ella, Akane vio, con horror absoluto, decenas y decenas de imágenes llenar la pared, cada una de ellas siendo una foto de sí misma en diferentes ubicaciones y posiciones, siendo obvio que muchas de ellas habían sido tomadas de manera discreta mientras que el resto habían sido extraídas de algunas de sus participaciones en películas o series
Girando rápidamente la cabeza con la intención de tratar de descubrir más de su entorno, Akane solamente pudo sentir su corazón apretarse en terror mientras notaba que en cada rincón de la habitación, sin importar si habían muebles o no, se había llenado por completo de imágenes de ella misma, generando que su ansiedad empezara a crecer tras cada segundo a la vez que su respiración se aceleraba a niveles preocupantes
- Te gusta? - hablo una voz de manera repentina que hizo que Akane girase su cabeza de manera casi instantánea, revelando la figura de un hombre de pie junto a una puerta de madera abierta, aparentemente habiendo entrado en su momento de pánico intenso mientras le sonreía con amabilidad espeluznante
Pese a su situación, la mente de Akane ya había empezado a funcionar de manera instantánea, haciendo que analizara al hombre de manera practicada antes de siquiera reaccionar ante el temor que sentía
Lo primero que notó fue su cabello negro desarreglado que le hacia parecer como si acabará de despertar, seguido por un par de cejas afilada y ojos entrecerrados que parecían demostrar su morbosa alegría silenciosa, su nariz era ligeramente curvada y sus labios rosados formaban una sonrisa leve que solo sirvió para darle escalofríos a la joven actriz
El hombre vestía una camiseta azul y un par de pantalones ajustados negros que se pegaban a su cuerpo, demostrando su musculosa apariencia que intimido a la niña de sobre manera
Terminando su rápido análisis, los instintos de Akane parecieron finalmente ponerse al día con su cerebro, haciendo que la niña rápidamente intentara ponerse de pie desde donde estaba, solamente logrando que su frustración y temor crecieran al notar que sus brazos y piernas se encontraban atados con cuerdas de cuero a los bordes de la cama donde actualmente se encontraba acostada, imposibilitando su movimiento más allá de solo unos pocos centímetros
- Suéltame! - Grito Akane de manera desesperada, forcejeando locamente en la cama para tratar de escapar de sus ataduras mientras lloraba sin posible descanso
Riendo levemente el hombre ignoro sus suplicas, empezando a caminar tranquilamente alrededor de la habitación mientras veía a las imágenes pegadas en las paredes - siempre he sido un gran fan... - comento repentinamente mientras la pelinegra seguía gritando y llorando cerca a él
- Sabias? He visto cada una de tus apariciones en todo tipo de medios, desde el primer comercial que hiciste como una bebé hasta la ultima aparición que hiciste la semana pasada en aquella serie... - comentó previo a soltar un suspiro nostálgico, sonriendo levemente para si mismo a la vez que giraba hacia Akane y caminaba hacia la cama donde se encontraba acostada, sentándose en el borde de la cama y moviendo su mano derecha hasta la cabeza de la chica, empezando a acariciar su cabello con lentitud
Ignorando como la pelinegra se había congelado de terror bajo su toque, el hombre solamente rio suavemente a la vez que se inclinaba, conectando su frente con la de la chica - podríamos decir que soy tu mayor fan... Y, como tal... No es obvio que merezco una recompensa por haberte apoyado durante tanto tiempo? - susurro mientras sus labios se encontraban a centímetros de distancia de la pelinegra, generando que cerrara sus ojos fuertemente mientras más y más lagrimas caían al sentir la impotencia y el temor crecer con mayor fuerza tras cada palabra que soltaba el hombre
- lo único que mereces es la cárcel - habló una voz profunda y fría a espaldas del hombre, congelándolo por completo durante un breve segundo que pronto fue roto cuando el hombre recibió una patada en el rostro que lo envió a rodar por el suelo hasta que golpeo una pared, haciendo que varias de las imágenes cayeran sobre él suavemente
Abriendo sus ojos al sentir que la presencia del hombre se alejaba, Akane solamente pudo ver en confusión y duda a la figura que se encontraba de pie sobre la cama, encarando directamente al hombre que la había secuestrado mientras que parecía jugar hábilmente con un pequeño objeto metálico en su mano
Aquella figura tenía una estatura que no concordaba con la voz que acababa de utilizar, siendo que, en base a su altura y complexión, la chica solamente pudo suponer que se trataba de alguien de su misma edad o, en otro caso, que poseía algún tipo de situación que lo hacia verse más joven de lo que en realidad era
Él estaba vestido con una larga gabardina negra que ocultaba por completo gran parte de su cuerpo, utilizando la capucha de la prenda para poder ocultar su cabeza mientras que la chica podía ver, debido a la posición lateral del extraño, que utilizaba unos pantalones holgados negros y lo que parecían ser un par de botas del mismo color
- No llego a hacer nada muy... Indebido, cierto? - pregunto el extraño en voz baja, girando ligeramente su cabeza para verla y permitiendo que la chica viese sus ojos negros profundos y la mascarilla metálica que ocultaba la mitad inferior de su rostro
Incapaz de siquiera pensar con claridad, la pelinegra solo atinó a asentir silenciosamente, consiguiendo que el extraño le diera una ligera mirada antes de volver a ver al hombre, haciendo que la chica hiciera lo mismo y se congelara al ver como, lo que anteriormente había sido un hombre que podía ser considerado atractivo, ahora parecía ser una especie de monstruo de película debido a como su mandíbula se había separado de su rostro, haciendo que colgara y revelara el interior de su boca
- Te gusta? Es un ligero efecto secundario de ser pateado por unas botas con placas de acero - tarareo el extraño mientras el hombre, extrañamente, no emitía ni un mínimo sonido, haciendo que el extraño suspirase antes de saltar de la cama y caminar tranquilamente hacia él
- Vamos, no crees que de verdad te dejare ir tan fácil como esto, cierto? - susurro el extraño, poniéndose de cuclillas frente al hombre mientras el objeto metálico en su mano se extendía hasta volverse un bo
Observando con morbosa curiosidad lo que pasaría, la chica solamente pudo sentir que su respiración se detenía levemente cuando el extraño empezó a aporrear constantemente al hombre, haciendo que se despertara de su estado desmayado y empezara a gritar de dolor al finalmente sentir lo que había pasado
Sin embargo, pese a que el hombre se había levantado, el extraño simplemente siguió golpeándolo fuertemente con el bo, lentamente volviendo su rostro en una pulpa sangrienta y sollozante que hizo que la chica sintiera una mezcla entre alegría por como el hombre estaba siendo destrozado, asco por lo que lentamente se estaba volviendo su apariencia y terror ante lo brutal que estaba siendo el extraño
Finalmente, luego de lo que pareció ser horas pero en realidad fueron solo minutos, el extraño suspiro con aparente aburrimiento - esperaba más de ti... Pero supongo que la vida no es un anime donde siempre hay peleas épicas... - murmuró apenas audible para la pelinegra previo a mover su brazo rápidamente y, horrorizando a la chica, atravesar la garganta del hombre con el bo metálico, lentamente haciendo que su secuestrador empezara a sangrar y morir frente a sus ojos
Suspirando con aburrimiento, el extraño simplemente se puso de pie y se dio la vuelta, caminando tranquilamente hacia ella mientras ignoraba con absoluta facilidad la bizarra escena del hombre muriendo tras él
Observando durante un breve segundo al hombre que lentamente se acercaba más y más a la muerte, Akane movió su mirada con rapidez hacia el extraño, queriendo evitar ver la sangrienta escena a la vez que su cuerpo temblaba levemente ante el temor de lo que haría a continuación el chico que lentamente se acercaba a ella
Sin embargo, sorprendiéndola enormemente, el encapuchado simplemente empezó a desatar las sogas de cuero que la ataban, tranquilamente haciendo su trabajo
- Gra...gracias... - susurro Akane poco tiempo después mientras el encapuchado liberaba su ultima extremidad atada
Ante su susurro, el chico simplemente suspiro y le dio una ligera mirada antes de continuar desatando sus ataduras - Numero 1 no camines sola en calles desoladas si eres una persona famosa, numero 2 siempre lleva algo para protegerte en caso de peligro y numero 3 ten un botón de pánico que alerte a alguien en caso algo te suceda - Hablo el extraño de manera clara y concisa haciendo que la pelinegra se encogiera levemente en su lugar al sentirse regañada
- perdón... - susurro, aún sintiendo temor por el extraño pero a su vez sintiendo gratitud por como la había salvado y por sus consejos
Suspirando una vez más, el extraño finalmente se alejo de ella luego de haberla liberado por completo, permitiendo que la chica se sentara lentamente en la cama mientras frotaba sus muñecas con dolor residual de haber sido atada de aquella manera
- Ya alerte a la policía, deberían estar aquí en... Quizás unos 3 minutos - Comento el extraño haciendo que Akane levantase la mirada y lo viera, permitiéndole notar como se acercaba a la ventana de la habitación, haciendo que la chica supusiera distraídamente que quizás era por ahí por donde había entrado en primer lugar
- Espera! - lo llamo, deteniendo al chico mientras uno de sus pies ya se encontraba en el marco de la ventana, listo para escapar de ahí - yo... Como puedo llamarte? - pregunto tímidamente, generando un silencio durante unos breves segundos previos a que el chico silenciosamente se impulsara hacia arriba, parándose por completo en el marco de la ventana mientras le daba una ligera mirada por encima del hombro
- Llámame... Lucifer - Comentó antes de saltar y desaparecer de la vista de la chica, haciendo que observara la ventana durante unos breves segundos
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- ...porque demonios dije lucifer... - se susurró Minoru con el rostro completamente sonrojado en vergüenza mientras se encontraba acostado en su cama hecho una bolita apenas unas horas después de haber salvado a Akane y haber oído la perorata que le dieron sus padres respecto a sobre porque había faltado a la escuela otra vez