Con una evidente expresión de sorpresa, Kael tuvo que forzar unas palabras a salir de su boca.
-"Eso es… Entonces tu eres…"
-"Si. Soy uno de los descendientes del 'traidor'."
-"… ¿Los clientes del bar también?"
-"Si, lamentablemente es así."
Hubo un momento de silencio, mientras Kael parecía reflexionar la información, Seamus se limitó a observarlo en silencio.
-"Entiendo la historia. Lo que no entiendo es por qué decidiste compartir algo tan importante. Somos casi completos desconocidos."
-"…Comprendo tu sospecha, joven. Pero lo cierto es que aún no te he contado todo."
-"De casualidad, ¿Tiene que ver con el estado de la gente de la aldea?"
-"Jo… Eres más perspicaz de lo que pensaba. Estas en lo cierto, tiene relación con la maldición y mi gente."
Tomándose un momento para pensar, Seamus parecía tener dificultades para hablar.
-"Mhmm… Bien, digamos que aquel 'Dios' no fue el único en visitar a mi antepasado. En sus momentos finales, se dice que otro ser divino lo visito. Como si fuera costumbre, ese 'Dios', o mejor dicho, 'Diosa' le ofreció un 'trato'. Cuando llegue el momento, enviaría a un 'Elegido' a salvarnos, y a cambio, ella se quedaría con las almas de los que perecieran antes de ese momento."
-"E-Entonces, los aldeanos que parecían sin vida, en realidad ¿Fue porque no tenían alma?"
-"…"
Seamus no respondió, pero para Kael ese silencio era prueba suficiente para probar que lo que dijo era cierto.
-"¡¿Y qué pasa con Ciara y el resto?! ¿Cómo es posible que estén bien?"
-"Eso era a lo que estaba llegando. Lo más probable es que Ciara sea el 'Elegido' que mencione. Todo aquel que entra en contacto con ella, parece no ser afectado por el 'trato'."
-"Pensar que una niña tan pequeña sea la salvadora de la aldea… No sé si sentirme aliviado o triste por ella."
-"Entiendo lo que quieres decir, a mí también me duele que cargue con algo tan pesado como esto"
-"Mire, señor Seamus… Lamento ser tan insistente, pero si ya tienen a su salvadora, ¿Qué busca con decirme todo esto?"
-"…Mmm, siento no ser directo. Cuando mi padre me enseño sobre esto, odiaba la idea de quedarme quieto sin hacer nada mientras mis amigos, conocidos y familia morían, por lo que decidí investigar por mi cuenta una forma de deshacer la maldición de esclavitud y la marca en mi espalda. Tras décadas de investigación, pude encontrar una solución, por desgracia, mi edad y mi cuerpo no me permiten conseguir lo que necesito. Ahí es donde entras tú, joven."
-"¿Yo? No creo que sea de mucha ayuda para usted, ni siquiera sabía dónde estaba hasta que me lo dijo."
-"No es necesario, solo debes ayudarme a obtener lo que te diga. De esa forma, combinando el… 'poder' de Ciara, podré salvar la aldea y su gente."
A pesar de no llevar mucho tiempo en la aldea, Kael había desarrollado un apego por el lugar y por Ciara, a la cual consideraba como una pequeña hermana con mucha energía.
-"…" Sin embargo, el objetivo de Kael seguía sin cambios: Encontrar a su madre. Y no podía perder más tiempo en la aldea… (O eso me gustaría decir… Pero sé que si me voy sin haber hecho nada, me arrepentiré. Además, quiero ayudarlos y, si es posible, eliminar la 'esclavitud').
-"Bien, te ayudaré. ¿Qué tengo que hacer?"
-"¡Jo, Jo! ¡Sabía que lo harías, joven! ¡Muchas gracias!"
Seamus se acercó a Kael y lo abrazó con gran fuerza, dejándolo sin aire.
Cuando finalmente lo soltó, Kael estaba sin aire.
-"Jo, Jo, lo siento joven, me emocione un poco."
-"T-Tranquilo, estoy bien. Tienes más fuerza de lo que parece ja, ja…" Una vez que recuperó el aliento, preguntó:
-"¿Qué necesitas que consiga? Creo que cuando antes vaya a buscarlo, mejor."
-"Oh, es cierto. No es mucho realmente, por lo que deberías poder acabar con facilidad. Lo primero que necesito es un par de hierbas del bosque; luego te diré cuales. Y por último, cadáveres de Bestia No-Muerta."
-"¿Bestias…? ¿Para que necesitas eso?"
-"Confía en mí, son necesarias. Y como habías dicho que sobreviviste al Bosque Maldito, significa que eres lo suficientemente fuerte como para derrotar a esos monstruos."
-"Derrote algunos, pero…" Habia un problema: El humo negro. Sin importar cuantas Bestias derrote, simplemente van a desaparecer.
-"¿Pero? ¿Hay algún problema?"
-"¡Oh! Si voy al bosque, creo que sería mejor ir con alguien. De esa forma no me perdería intentando volver." (¡Bien! Puedo dejarle el golpe final al que vaya conmigo, evitando que el humo negro lo devore. Je, Je, soy un genio…)
-"Hablare con uno de los hombres de la taberna, deberían ser lo suficientemente fuertes para ayudarte."
-"Gracias."
-"Jo, Jo. Gracias a ti por ayudarme. Sin nada que agregar, me gustaría que fueras esta noche, para que nadie de la aldea vea los cadáveres, ¿Te parece bien?"
-"No hay problema, iré esta noche."
-"Perfecto, entonces bajemos ya, seguro que Sile habrá cocinado algo delicioso."
Al momento de bajar por las escaleras, se quedaron boquiabiertos ante lo que vieron:
Los clientes estaban arrodillados y con la cabeza baja, mientras un letrero en sus cuellos decía 'Culpables'. De pie frente a ellos, Sile sostenía una sartén mientras les gritaba –"¡¿Entendido?! ¡No quiero que vuelvan a actuar de esa forma frente a Ciara!"
-"¡SI, SEÑORA!" Gritaron al mismo tiempo.
-"Bien, pueden retirarse."
-"¡GRACIAS, SEÑORA!" Uno por uno huyeron de la posada.
Notando a Kael y Seamus, Sile les sonrió de manera 'dulce' y preguntó —"¿Lograron solucionar sus diferencias?
Ambos se miraron y respondieron al mismo tiempo:
-"¡Si, señora!"