Punto de vista de Yarin:
No nací siendo un bebé ordinario.
Cuando aún era un niño pequeño, la gente a menudo me contaba historias sobre los mágicos días de juventud de mi madre. Todo era tan fascinante como los mitos y leyendas, desde las majestuosas montañas de nieve hasta los densos bosques, desde la chica del pequeño pueblo hasta la reina del país.
Como el único hijo biológico de mi madre, mi sangre fluía con un antiguo linaje de hace miles de años. Se decía que era completamente diferente de otros niños cuando nací. Ni siquiera tenía género.
Esto hizo que mis padres se angustiaran, temiendo que tuviera alguna enfermedad o discapacidad desconocida. La gente gradualmente aceptó mi situación actual solo después de que se reveló el secreto de mi linaje.
