—Jia Shiyun no quería ser entrometida, así que dijo —Jinnuo, olvídalo. No discutas.
—¿T-Tú eres Jia Shiyun? —Lin Moli la reconoció y no pudo evitar exclamar sorprendida—. He visto la película en la que actuaste. No está mal. Realmente no esperaba verte aquí.
—Shiyun, eres demasiado magnánima. Afortunadamente, estabas bien después de que te chocaron. De lo contrario, las consecuencias habrían sido terribles —dijo Tian Jinnuo.
El grupo de personas ignoró a Lin Moli.
Sin embargo, justo cuando Jia Shiyun dio un paso hacia adelante, el collar de jade alrededor de su cuello cayó al suelo.
Jia Jia sabía lo importante que era este collar para Jia Shiyun, así que se apresuró a agacharse para recogerlo. Su expresión cambió drásticamente al decir —Hermana, tiene una grieta.
Tian Jinnuo lo tomó rápidamente y lo miró. De hecho, había una grieta muy grande. Su expresión también cambió.
—Shiyun, ¿qué vamos a hacer?
