Un mes había pasado...
Nuevos edificios en el territorio de la Manada de Aulladores Oscuros se iban completando uno tras otro, y los recién llegados de la Manada de la Luna Roja ya no eran recién llegados. Dejaban la casa de la manada y otros alojamientos temporales a medida que se mudaban a sus nuevas casas, y todos tenían trabajos.
Era un ajuste en comparación con lo que tenían en la Manada de la Luna Roja, pero no era difícil hacer cambios cuando era una mejora.
Algunos incluso expresaron el deseo de abrir sus propios negocios con locales en Darkbourne.
Damon convirtió una sala de recepción en el primer piso de la casa de la manada en una oficina. Se utilizaba exclusivamente para el papeleo relacionado con nuevos edificios, negocios, suministros y otras cosas relacionadas con el reciente flujo de miembros de la manada.
A Talia le encantaba revisar los documentos, fascinada con todo este trabajo detrás de escenas necesario para hacer funcionar la manada.
